Glenda Seifert: «Las mujeres tenemos una mirada diferente y le ponemos nuestra impronta a la gestión»

La intendenta de Pampa del Infierno habló sobre el reciente rebrote del coronavirus y el trabajo de equilibrar las cuentas de un municipio «quebrado».

Glenda Seifert es una de las 13 intendentas repartidas entre los 70 distritos chaqueños. Es la primera mujer intendenta en Pampa del Infierno y su gabinete está compuesto en un 80% por mujeres. «Nunca me condicioné por el hecho de ser mujer. Tenemos una mirada diferente a la de los hombres y tratamos de ponerle nuestra impronta a la gestión», apuntó la jefa comunal a Noticias d.

Hubo preocupación en Pampa del Infierno por un incremento de contagios en diciembre, «con 200 casos positivos como consecuencia de una fiesta clandestina«, afirmó Glenda Seifert, quien aclaró que la situación fue controlada. En paralelo, continúa el seguimiento de las personas que tuvieron que aislarse y que reciben la asistencia del municipio.

Si bien no hubo restricciones en el acceso a la ciudad, durante las fiestas de fin de año se adoptó la postura de pensar en la cuestión sanitaria y de seguridad, en una localidad con 25 mil habitantes. «Tratamos de consensuar con los jóvenes y los organizadores de eventos la forma de habilitar las fiestas con medidas de protocolo, permitiendo el acceso a las reuniones de gente de la localidad con tapabocas y al aire libre, para evitar que se repitan situaciones de contagios masivos», detalló la intendenta.

Tormenta económico-sanitaria

Producto de la baja en los índices de coparticipación y en la recaudación municipal, «las arcas del municipio se vieron afectadas, pero de a poco estamos volviendo a la normalidad«, explicó Seifert, quien enumeró el patentamiento y la renovación del carnet de conducir como signos de recuperación. «La intención de la gente es tratar de ponerse al día», acotó.

En el mismo sentido, apuntó que hubo una merma muy importante en los sectores de industria y comercio, al tiempo que se registró un crecimiento de los emprendimientos familiares con el fin de subsistir. Así las cosas, se concertaron reuniones con empresarios, con el fin de reactivar las actividades con protocolos, para preservar la salud y evitar un duro golpe en la economía de la ciudad.

La intendenta contó que recibieron apoyo del gobierno provincial, «con desembolsos en los momentos más difíciles«. Al mismo tiempo, «tuvimos que trabajar fuerte para tratar de acomodar las cuentas, en un municipio que estaba quebrado. Hace un año, nos encontramos con haberes atrasados, sin la posibilidad de pagar aguinaldo«. A esto, se le sumó la cuestión sanitaria: «A los dos meses de asumir, debimos atender una situación complicada por el dengue y luego llegó la pandemia».

Pese a la tormenta, la jefa comunal contó que «el 2020 terminó con el pago en tiempo y forma de los salarios y los aguinaldos, más un bono destinado a los programas que cobran menos y un bolso navideño para todo el personal».

Con obras, pero sin presupuesto

Con respecto a la obra pública, la intendenta reveló que si bien se hicieron las presentaciones correspondientes para los programas nacionales, «aún no se concretaron», aunque sí las provinciales, vinculadas con las construcción de viviendas, «que se encontraban paralizadas por la pandemia y se reanudaron a fin de año».

Un problema que deberá enfrentar en 2021 es el de gestionar sin presupuesto, ya que el Concejo Deliberante decidió no votarlo, luego de reclamar un cambio por un aumento en los cargos superiores, que no incluía a los trabajadores municipales.

Vocación de familia radical

El recorrido político de Glenda Seifert está marcado por su abuelo, Juan Seifert, quien fue también intendente de la ciudad. Glenda reconoció que en algún momento, mientras estudiaba derecho en Corrientes, pensó en continuar sus pasos.

Siendo estudiante, le tomó «el gustito a la política» militando en la agrupación radical Franja Morada. En 2007 y 2015, fue electa concejala, mientras que en 2019 decidió dar el salto a la intendencia.

Seifert está casada y tiene una nena de 8 años. «Ya me conocieron así y me acompañan. Todos los días nos levantamos para trabajar con la intención de disminuir un poco la desigualdad en el norte del país, una región muy postergada», afirmó.

Con la intendencia en el bolsillo, Seifert irá por el liderazgo del radicalismo chaqueño. Este año, acompañará en la fórmula a su colega de Coronel Du Graty, Juan Carlos Polini, por Convergencia Social, para encabezar la titularidad del radicalismo en Chaco.

Finalmente, Glenda se esperanzó con respecto a 2021: «Luego de la gran enseñanza que nos dejó el año anterior, debemos valorar la salud, la familia y los afectos».