Ariel Brites: «Seguir apostando a la educación, al trabajo con jóvenes, acompañarlos y aprender de ellos»

Él ciudadano goyano es Técnico en Informática y ejerce como docente de la Escuela Técnica Arq. Francisco Pinaroli.

Ariel Brites actualmente se desempeña como docente en la Escuela Técnica Arq. Francisco Pinaroli y, además, realiza tareas como técnico informático en el Colegio Secundario Sagrado Corazón de Jesús de Goya. En dialogo con Noticias d contó sobre su experiencia y comentó que al terminar la secundaria realizo una Tecnicatura en Informática y luego curso el Profesorado en Tecnología. Aunque paralelamente siempre fue aprendiendo de manera personal.

¿Por qué elegiste ser docente? ¿Que te motivó a elegir este camino?

– La elección de la carrera docente surge porque con el correr del tiempo me di cuenta que tenia mucha curiosidad por aprender y por compartir lo aprendido. Me gusta que otras personas puedan desarrollar ese proceso de aprendizaje y autodescubrirse en sus capacidades, en eso que les costaba porque no encontraban el camino o la forma de hacerlo. Porque posiblemente otras personas no lograron enseñarles de una forma significativa. Eso, en cierta forma, me llevó a elegir la carrera docente, más allá que tengo mucha paciencia y predisposición para entender a las personas, comprenderlas y buscar esa manera que necesitarían acorde a ellos.

¿Cuál es tu vínculo con las Instituciones?

– En cuanto a la vinculación con las instituciones, es siempre positiva, es un ámbito desafiante, donde la heterogeneidad de escenarios siempre propone ir mas allá de la formación docente, juega el papel humano ante todo en cuanto a la relación con los estudiantes, docentes y familias.

¿Cuáles fueron las peores dificultades que tuviste que atravesar?

– Siempre las hay. Desde el momento de la formación docente, todo lo que implica como estudiante hasta en el desarrollo de la tarea como profesional de la educación. Puntualmente las dificultades más interesantes fueron aquellas donde algunas instituciones escolares no cuentan con muchos recursos e insumos para realizar propuestas de trabajo o proyectos que necesitan materializarse. Es allí donde surge la creatividad, innovarse con lo que uno puede conseguir en el lugar donde se está. Pero rescato el valor humano de la motivación de estudiantes, docentes y familias que se movilizan para materializar y lograr cumplir proyectos o salidas que era impensadas en un primer momento superando esas dificultades.

¿Cómo eran tus profesores cuando eras estudiante? ¿Qué cambios ves actualmente con respecto a tu época?

– En mi época de estudiante ya veía docentes que destacaban, por su personalidad, por su manera de encarar la clase. Si bien actualmente hay otro enfoque en cuento a la practica docente, hay otras dinámicas de trabajo y de llegar a los estudiantes, me parece interesante rescatar que lo más importante que no debe perderse indistintamente del momento, es el factor humano y la relación cálida que pueda desarrollarse en el entorno educativo.

¿Cuál es el trato que tenés con tus alumnos? ¿Tuviste alumnos favoritos?

Siempre tengo un trato de respeto, de confianza, de ser una persona que puede guiar y acompañar, no me pongo en el lugar de ordenar o imponer. Favoritos creo que no, cada uno tiene sus peculiaridades y eso logra que cada uno sea tan importante como el conjunto del grupo. Lo ideal es buscar el trabajo colaborativo, compañerismo y fomentar la empatía, no hay favoritos si todos somos únicos.

¿Qué es lo más complicado y lo más gratificante de tu profesión?

– Los más complicado siempre es el tiempo. Hoy el tiempo es demasiado tirano en muchas cuestiones, nos suele ganar de antemano para realizar las cosas, el trabajo docente siempre es dentro y ,mucho más, fuera del aula, por ello insume un gran desgaste muchas veces. Otro aspecto que suele ser complicado es que la institución escolar es demasiado burocrática para algunas cuestiones generando algunos inconvenientes al momento de plantear propuesta o intervenciones. Lo más gratificante son los momentos compartidos, el desandar con cada grupo de estudiantes y las vivencias, recuerdos y anécdotas que van quedando en cada uno de ellos y en el docente, ni hablar.

– ¿Cuál dirías que es una de tus virtudes más destacadas?

– Seguir apostando a la educación, al trabajo con jóvenes, acompañarlos y aprender de ellos, de lo que tienen para decir, hacer y mostrarnos.

¿Tenés una anécdota que recordás siempre?

– Más que anécdota, son momentos que hemos compartido con un grupo de estudiantes, cuando realizábamos un taller de radio los días sábado en la escuela técnica Pinaroli. Ese espacio donde intercambiábamos, nos divertíamos, podíamos ser auténticos y originales, charlar, expresarnos, era nuestro espacio que lo fuimos construyendo entre todos, siempre lo recuerdo, entre tantísimas otras experiencias dentro del curso.