Consultores psicológicos: una vía de contención para los que sufren la cuarentena

Abrieron una línea telefónica para atender a las personas que la están pasando mal en el aislamiento.

Días atrás, el Gobierno nacional decretó la cuarentena preventiva y obligatoria en el marco de las medidas para evitar la propagación del coronavirus. Desde entonces, todos los ciudadanos tomaron el compromiso de resguardarse en sus hogares y salir a la calle solo por lo indispensable, para así cuidarnos entre todos.

En aislamiento, muchos aprovechan el tiempo para hacer diferentes actividades postergadas, pasar el rato con los chicos o realizar ejercicios físicos, entre otras cosas. Sin embargo, hay un aspecto central que resulta trascendental y pocos tienen en cuenta: el cuidado de la salud mental.

No estamos acostumbrados a quedarnos en casa y, en el trascurso de los días, podemos experimentar un sinfín de sensaciones diferentes. En este contexto, un grupo de consultores psicológicos puso a disposición una línea telefónica para brindar ayuda a todas las personas que lo requieran durante el aislamiento.

“Decidimos ayudar a las personas que necesitan soporte psicológico, pero nosotros no somos psicólogos, somos consultores psicológicos, es decir que trabajamos con personas sanas y que no fueron derivadas a un profesional», contó Florencia Puig, una mendocina que volvió a su provincia natal después de vivir más de 16 años en Buenos Aires, donde descubrió el Counseling.

«La especificidad del Counseling no es la terapia, ni el espacio de lo psicoterapéutico, sino el desarrollo personal y humano. Por esa razón se los llama consultantes y no pacientes”, explicó Florencia.

“Colaborar con la gente fue idea de Anabela Ciario, una Counselor que vive en Buenos Aires y que convocó a un grupo de ocho colegas y amigos, pero esto se viralizó tan rápido que ya somos 25 personas que estamos colaborando con la gran cantidad de gente que nos está llamando», contó Florencia y agregó: «Cada counselor está atendiendo sólo a dos personas para poder hacerlo bien. Hasta tenemos personas de Chile y Ecuador”.

Según Puig, la mayoría de los consultantes son casos de “gente angustiada, con miedo a lo que pueda pasar, que están mucho tiempo en redes sociales y que lee todo lo que ahí se publica».

Sin embargo, distingue dos grandes grupos: «Uno, son las personas que están ocupadas todo el día y que ahora están obligadas a quedarse en casa y pensar en uno mismo, ahí es donde aparecen los pensamientos recurrentes, que son angustias tapadas por la hiperactividad y es el momento de ocuparse de esto».

«Y el otro caso recurrente son las mamás que se sienten desbordadas, ya que no están acostumbradas a estar tanto tiempo con los chicos y con su pareja”, explicó Florencia.

Si necesitás ayuda podés enviar un mail a [email protected] consignando un número de teléfono. «Ojalá que podamos ayudar a la mayor cantidad de personas”, sintetizó Florencia.

Contenido provisto por: Rodrigo Olmedo