Cerro de la Gloria: la historia detrás de un imperdible de la provincia

Todas las personas que visitan la Ciudad de Mendoza tienen una parada obligada en este tradicional lugar, a casi tres kilómetros del centro.

El Cerro de la Gloria es uno de los lugares tradicionales que incluyen en sus recorridos los turistas del interior del país a la hora de conocer la provincia. Ahora bien, ¿qué esconde este sitio? ¿Cuáles son sus principales atractivos?

Este paseo histórico se encuentra a casi tres kilómetros del centro de la Ciudad de Mendoza y para acceder a él es necesario atravesar el Parque General San Martín. Cabe destacar que la ruta que se transita hacia las montañas va ganando altura hasta llegar al Cerro.

En el camino ya es posible visualizar la característica escultura de bronce, de 14 toneladas, realizada por el escultor uruguayo Juan Manuel Ferrari en homenaje al libertador José de San Martín. Este monumento, sin lugar a dudas, es el atractivo principal del lugar.

Este espacio en el Cerro en verdad rinde culto al Ejército de los Andes y retrata el camino hacia la libertad del pueblo, que comenzó en El Plumerillo, atravesó la Cordillera y culminó con éxito.

El Cerro en la antigüedad se llamó «del Pilar» y tenía una de las vistas más privilegiadas de la ciudad. En el año 1911 se eligió este sitio para colocar la escultura del libertador, sobre una base de roca que simboliza el terreno cordillerano.

Un dato de su particular construcción tiene que ver con que las piedras utilizadas fueron traídas desde Uspallata, en la zona de la alta montaña de Mendoza. En la escultura, San Martín observa cómo avanzan sus tropas y bajo él puede leerse la inscripción «La Patria al Ejército de los Andes».

En la obra también aparecen las patricias de la zona, que donaban sus joyas para el Ejército de los Andes, y en la cima, la imagen de la Libertad con los brazos extendidos.

Contenido provisto por: Nuria Pacheco