El objetivo es rediseñar los circuitos electorales, también llamados ‘’voto parroquial’’ para habilitar la confección de los padrones electorales considerando el lugar de residencia del elector permitiendo que el Municipio divida la jurisdicciones y actualice del nomenclador de calles y barrios.

 Además, promueve la participación política de los vecinos y así, poder dotar a los municipios de procesos electorales mucho más ágiles donde ya no existan largas colas fuera de las escuelas.

Con la implementación de esta medida se estima que el 93% del electorado en Río Negro tenga garantizado el ejercicio del derecho a votar en el establecimiento más cercano a su domicilio en los comicios de 2023.