El 08 de Junio, viajamos a Buenos Aires con la intención de conseguir nuevas cuadras de asfalto para la localidad. Nos recibió el Secretario de Obras Públicas de la Nación, Martín Gill. Nos atendió de manera muy cordial y manifestó la “grata sorpresa” que significaba la visita de un “joven” Intendente del interior.

En la reunión que mantuvimos, le conversé sobre Tilisarao, los proyectos que tenía para aquellos primeros meses, la necesidad de la obra pública en materia de trabajo y progreso; la identidad progresista de los vecinos y las vecinas; y por qué necesitábamos reimpulsar la esperanza en la localidad, golpeada por la Pandemia.

Hizo un par de llamados, me derivó a hablar con asistentes, me dirigí de una oficina a otra, hasta que finalmente nos volvimos a encontrar, nos estrechamos la mano y deseamos los éxitos correspondientes.

Ese día volvimos con 9 cuadras de asfalto para localidad que hoy vemos como obras culminadas en las cuatro cuadras de la calle Madre Teresa de Calcuta, cuatro más de l Eva Duarte de Perón y una cuadra en calle 9 de Julio. Era cuestión de soñar, pero también gestionar la realidad de esos sueños.