Dionisio Scarpin: «Avellaneda es una ciudad muy progresista, de mirar siempre para adelante»

El Intendente de la localidad santafesina destacó que la economía local se está recuperando a niveles de pre-pandemia y avanza con numerosos proyectos de gestión.

Dionisio Scarpin siguió el legado político de su padre, Delki, quien fuera ocho años Intendente de la localidad santafesina de Avellaneda. En junio del año pasado fue reelecto y transcurre su tercer mandato, tal vez el más difícil, en plena pandemia de coronavirus y con el conflicto abierto de la máxima cerealera del país, Vicentín, con sede en su ciudad.

Radical y presidente del Foro de Intendentes de la UCR provincial, comenzó su militancia en Franja Morada cuando cursaba la carrera de contador en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad del Litoral, y entre 2001 y 2011 fue secretario de Producción y de Gobierno en la localidad, además de concejal, antes de asumir en la Intendencia.

La barrera del Covid-19

El proyecto político que comenzó en 2011 sigue su curso, ahora transitando el coronavirus. Al momento, la ciudad se recupera de un pico de contagios y ahora se encuentra con más de 30 casos activos. Scarpin informó que hay un equipo de la Municipalidad con el que se trabaja en conjunto para asistir a la salud física y psicológica de los afectados y económicamente a aquellos sectores más vulnerables.

El propio Intendente tuvo Covid, pero ya se recuperó y pudo salir ileso del virus: «No la sufrí mucho. Un día tuve algo de fiebre, 37 y medio, un poco de congestión y dolor de cabeza. Las personas que contagié -mi hermana, mi cuñado y un amigo- no tuvieron inconvenientes, por suerte», contó en diálogo con Noticias d.

En cuanto a la actividad económica, el jefe comunal afirmó: «Lo único que sufrió fue el comercio y el trabajo informal. Hubo un bajón muy importante en marzo y abril, y en mayo empezó a recuperarse. Junio anduvimos bien, julio mejor y ahora estamos casi en los niveles pre pandemia, en cuanto a recaudación propia».

Vicentín

Scarpin fue uno de los que levantó bandera en contra de la intervención del Estado nacional en la empresa cerealera Vicentín: «Para mí la solución pasaba por lo que está pasando ahora, que el concurso de acreedores siga su marco donde tenía que seguir. Todo el mundo anunciaba en marzo que en abril Vicentín quebraba y nosotros decíamos que eso era imposible. El tiempo lo está demostrando».

Y agregó: «Hoy la compañía tiene contratos firmados hasta finales de 2021. La estructura no corre riesgo y después tienen que ver cómo pagan las deudas. La salida era un fideicomiso, nosotros lo planteamos de entrada. O que venda parte de su capital accionario o armar una sociedad mixta donde se podía quedar con algunas acciones porque es importante que las empresas continúen y sigan trabajando».

Proyecto transversal

La gestión del Intendente empezó con el objetivo de un trabajo transversal: «Abandonamos esa idea de trabajo por secretaría y empezamos a trabajar para determinar las prioridades de la ciudad. Determinamos cuatro ejes que son: calidad institucional, desarrollo permanente, comunidad inclusiva y territorio sostenible».

Y dio más detalles: «Trabajamos mucho en modernización, la internacionalización de la ciudad, la participación ciudadana y planteamos obras de infraestructura básica, especialmente el tema pavimento e iluminación sobre todo de la parte productiva, tanto en la zona rural como en nuestro parque industrial».

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Scarpin planteó a Noticias d que el objetivo de crear áreas prioritarias se desarrolló teniendo en cuenta la importancia de la generación de empleo, «especialmente servicios a la industria». En ese sentido, crearon una agencia público-privada para el desarrollo de las empresas tecnológicas.

Respecto del trabajo social, el Intendente sostuvo que su gestión estuvo abocada también a solucionar problemas de hábitat, tanto en viviendas como en niñez y adolescencia, con una fuerte tarea en lo deportivo y cultural en los barrios.

También se inclinó en las iniciativas por el cuidado del medio ambiente como eje: «Trabajamos con el proyecto de gestión diferenciada de residuos, la creación de nuevos espacios públicos, una red de ciclovías y la eficiencia energética con luces led en todos los edificios públicos».

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«La actividad del intendente es muy demandante, sobre todo en comunidades chicas como la nuestra. Capaz estoy volviendo de inaugurar una vivienda y me llaman por teléfono porque una persona que se quedó en la calle. Y los municipios argentinos desde el punto de vista financiero están muy olvidados. Argentina es un país federal políticamente, pero muy centralista económicamente, y los municipios sufren mucho eso porque somos los que más eficientemente ocupamos los recursos, siendo los que menos tenemos», graficó Scarpin a Noticias d.

Para finalizar, el jefe comunal resaltó la calidad institucional de Avellaneda y la organización de su sociedad, destacando el trabajo de las tres cooperativas más importantes de la ciudad: la agrícola de 101 años de historia, la de servicios públicos con 80 años, y la cooperativa de transporte «que es una de las más grandes del país». Y añadió: «Es una fortaleza que nos distingue de otras localidades, más allá de que nos tildan de conservadores, es una ciudad muy progresista en cuanto al desarrollo de empresas y de recursos humanos, de mirar siempre para adelante para forjar proyectos importantes».