Reconstruyen en 3D válvulas aórticas y las aplican por primera vez a cuatro niños argentinos

El cirujano cardiovascular infantil Ignacio Berra aplicó la técnica por primera vez en el mundo en niños con insuficiencia aórtica severa y lograron una recuperación completa.

Una técnica que permite reconstruir en 3D las válvulas aórtica y pulmonar en niños con insuficiencia aórtica severa fue creada por el cirujano cardiovascular infantil argentino Ignacio Berra, quien por primera vez en el mundo la aplicó a cuatro niños argentinos, los cuales lograron una recuperación completa.

Uno de los beneficios de la nueva técnica es que utiliza parte del pericardio, la membrana que recubre el corazón, del propio paciente para reconstruir la válvula que funciona mal, por lo que se adapta «perfectamente» a su anatomía.

«Si la válvula aórtica no funciona correctamente, puede interferir en el flujo sanguíneo y obligar al corazón a trabajar más para llevar la sangre necesaria al resto del cuerpo, lo que genera dificultad para respirar, fatiga, dolor en el pecho, pérdida del conocimiento, arritmia y puede llevar a la muerte súbita por ataque cardíaco», explicó Berra en dialogo con Télam.

El médico, que estudió en la UBA y trabaja en el Hospital Garrahan desde 2006, terminó de diseñar su técnica en el Hospital de Niños de Boston y la Facultad de Medicina de la Universidad de Harvard en 2015, y ya la aplicó en la Argentina en cuatro chicos con problemas aórticos.

«A partir de una tomografía reconstruimos en 3D la aorta del paciente y luego diseñamos la válvula aórtica en la computadora. Después la imprimimos en 3D y la sometemos a un experimento de presurización, para saber si funciona bien», detalló.

Una vez probada la técnica, se realiza la cirugía

«Es la primera vez que se usa este procedimiento en el mundo. Se habían aplicado otras técnicas, pero la planificación en una computadora primero y la cirugía de reconstrucción valvular después no se había hecho nunca«, afirmó Berra.

Consultado sobre las alternativas disponibles hasta ahora para niños con estas patologías, el cirujano cardiovascular precisó que se podría haber utilizado «una prótesis mecánica, un injerto de donante cadavérico o el procedimiento de Ross, que consiste en utilizar como reemplazo la válvula pulmonar de la persona».

«Este es un caso de medicina personalizada, que funcionó con éxito en las cuatro primeras cirugías realizadas y los pacientes están en sus casas», completó.

El procedimiento, que también puede realizarse en adultos, beneficiaría a unos 50 chicos que cada año deben ser operados en el país debido a fallas en su válvula aórtica.

Berra había presentado hace unos meses el «Sistema de Perfusión Normotérmica Ex-Vivo», otra técnica innovadora a nivel mundial que permite preservar un órgano para trasplante en condiciones semejantes a las del cuerpo humano y se espera que duplique la cantidad de intervenciones.

Fuente: Télam

Contenido provisto por: Nuria Pacheco