Este miércoles, jubilados que se concentraron en las inmediaciones del Congreso en rechazo al veto de Javier Milei a la ley que mejoraba sus haberes fueron nuevamente reprimidos por la Policía Federal. La manifestación, que tenía como objetivo oponerse también al ajuste económico del gobierno de La Libertad Avanza, terminó con más de 10 heridos que sufrieron irritaciones y quemaduras por el uso de gas lacrimógeno.

El clima de tensión escaló cuando los agentes policiales comenzaron a dispersar a los manifestantes con gases y fuerza. Según informó el portal Prensa Obrera a través de su cuenta en X, uno de los heridos, identificado como Guillermo de la Asamblea de Ituzaingó, debió ser trasladado en camilla para recibir asistencia médica.

Guillermo de la Asamblea de Ituzaingó debe ser trasladado para asistencia. Ya son más de 10 los heridos en la represión del gobierno nacional contra la movilización en apoyo a los jubilados https://t.co/qsl1qJLTcB pic.twitter.com/bGa86sHMR7

— Prensa Obrera (@prensaobrera) September 18, 2024

Entre las personas reprimidas también se encontraba la diputada del Frente de Izquierda, Vanina Biasi. La legisladora relató que intentó socorrer a un jubilado que había sido tirado al piso por la policía, momento en que fue afectada por los gases: «Me agaché para ayudarlo y empezaron a empujar. De repente sentí el líquido del gas lacrimógeno en la cara», explicó la diputada visiblemente afectada. Además, expresó que a lo largo de su carrera ha sido expuesta muchas veces a este tipo de sustancias, pero que «nunca un gas me quemó como este».

La represión ocurrió un día después de que el presidente Javier Milei organizara un asado en la Quinta de Olivos para los diputados que apoyaron su veto a la ley jubilatoria. Este evento generó un fuerte rechazo por parte de los jubilados, quienes realizaron un cacerolazo frente a la residencia presidencial para manifestar su descontento.

El diputado Nicolás del Caño, que se solidarizó con los jubilados en redes sociales, denunció lo ocurrido: «Otra vez la ministra Bullrich manda a la policía a pegarle a jubilados y jubiladas. Mientras Milei y sus diputados se burlan del pueblo en un asado en Olivos, los adultos mayores son reprimidos todos los miércoles en sus protestas. Son un ejemplo de lucha», expresó.

Como en anteriores movilizaciones, el operativo de seguridad fue masivo y desproporcionado, a pesar de que los manifestantes son en su mayoría personas mayores. «Nosotros hacemos una movilización pacífica y la policía nos reprime. No traemos la violencia, la trae la policía», comentó un jubilado de 76 años que participó de la protesta. En diálogo con C5N, también expresó que «el protocolo antipiquete es anticonstitucional. Lo que es constitucional es el derecho a la protesta».

Una jubilada que también participaba en la marcha explicó la desesperada situación que viven los adultos mayores con sus pensiones: «Cobramos una jubilación que no alcanza para nada. Mi marido tiene cáncer de huesos y el remedio que necesita cuesta 8,6 millones. PAMI no nos lo da y ya presentamos dos amparos. Hace un mes que está sin su medicación», lamentó.

Foto portada: Página 12