A 18 años de su asunción como Intendente de Tandil, el histórico dirigente radical Miguel Lunghi debió enfrentar en este mandato las dificultades que planteó la pandemia de coronavirus y –médico de profesión- sigue de cerca su evolución: «Me preocupa la variante Delta, esperamos que se acelere la segunda dosis y Delta pase de largo». A pesar de las dificultades sanitarias, el jefe comunal avanzó con gestión de obras y la localidad bonaerense transita una situación epidemiológica de mayor tranquilidad.

«El ritmo de la economía cambió muchísimo a comparación del 2020 gracias al movimiento de la actividad turística durante el verano y el invierno. La gente tenía muchas ganas de salir y nosotros contamos con una ciudad tranquila, con sierras, 100% segura, ideal para todos», dijo Lunghi en diálogo con Noticias d, quien también destacó la actividad de la construcción, con 400 casas y edificios en construcción actualmente, obra pública, y la firma en el último mes de venta de terrenos del parque industrial por 20 millones de dólares.

Gestión en pandemia

El Intendente enumeró algunas de las iniciativas que avanzaron desde el municipio: «Tenemos cordón cuneta, asfalto, cloacas, gas, realizamos cambio de luminaria led, abrimos dos jardines maternales y construimos centros de salud e infantiles. Trabajamos mucho en cada una de las obras que hacen a la calidad de vida de nuestros vecinos, sobre todo apuntamos a la mayor obra, que es el mantenimiento de nuestra ciudad».

Además resaltó una serie de obras que recibió la localidad de parte del Gobierno Nacional, «obras importantes que mueven mucha mano de obra y generan un gran movimiento. Tenemos una obra de agua ya licitada y lista para adjudicar, falta solamente la firma del contrato. Además tenemos asfalto en negro por 42 millones de pesos y cuadras de hormigón alrededor de 35 millones de pesos y un centro infantil también dado por Nación».

Lunghi afirmó que apunta a terminar todas las obras que iniciaron y mantener las finanzas en orden: «Trabajamos fuertemente para tener un presupuesto equilibrado y contar con todos los proveedores y sueldos al día. Tandil será la ciudad intermedia más importante de la Argentina, tiene mucho empuje y una sociedad buena».

Y agregó a Noticias d: «Estamos trabajando con empresarios de distintos países, conectándonos con el mundo para realizar múltiples intercambios y se van dando distintas conexiones con otros intendentes de diferentes países. Escuchar a otros nos da mayor capacidad para gobernar, también se aprende de las acciones de otros».

Radical y militante de toda la vida

Lunghi es médico pediatra y lleva 37 años de profesión. Desde muy chico vivió la política muy de cerca, dado que su padre fue Intendente de la localidad en 1963 con el gobierno de Arturo Illia. «Soy radical, muy fanático de Illia y Alfonsín«, se definió.

A pocos días de las elecciones PASO, con triunfo local y agradecimiento a los vecinos de Tandil, el jefe comunal recordó su candidatura en 2003: «Poco a poco fui subiendo y la gente de la ciudad me fue eligiendo. Hoy llevo 18 años de Intendente».

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Por último, Lunghi precisó: «Mi pasión siempre fue y será la salud y en relación a la política, me satisface mucho ayudar a la gente, a los vecinos hablar con ellos, escucharlos. Sigan apoyando esta transformación hecha en Tandil, trabajemos todos juntos. Siempre busco el consenso y diálogo. No tomo decisiones sin hablar antes con el sector con quien tengo que trabajar. Creo que esa forma de trabajar nos dio y dará resultado».