Darío James, oriundo de Gaiman -provincia de Chubut-, es agricultor y fue durante muchos años jefe de compras, personal y administración de la cooperativa de energía eléctrica de la localidad. Si bien fue afiliado a la Unión Cívica Radical desde los 18 años, nunca había militado en política hasta que lo convocaron para postularse a intendente, en 2019.

«Me motivó el hecho de estar renegando contra los políticos que veíamos que hacían las cosas de forma incorrecta y nuestro pueblo estaba devastado. Entonces, dije vamos a meternos y a demostrar que se puede gobernar de otra forma», afirmó James en diálogo con Noticias d. Su propuesta fue bien recibida por los vecinos, ya que ganó las elecciones con el 55% de los votos.

James contó que al asumir notó que todas las áreas de gobierno estaban muy complicadas. «Cuando llegamos teníamos una deuda millonaria de proveedores y un municipio destruido en todo sentido. Teníamos una planta de personal excesiva, había mucha gente que estaba cobrando del municipio y no trabajaba. Además de tener una deuda muy grande de parte de nuestros contribuyentes, que en muchos casos jamás habían pagado sus impuestos».

Según el intendente, el primer año se propuso ordenar las cuentas, hacer un mantenimiento de los servicios y realizar 12 kilómetros de nuevos caminos rurales, que era un pedido de los chacareros para el mejor transporte de la mercadería.

«Tenemos a todos los proveedores al día, los sueldos regularizados, la economía equilibrada y una masa salarial en resguardo por cualquier cosa. Este año, lo que entra va a ser para el municipio y no para tapar agujeros como se hizo el año pasado«, diferenció James y agregó: «Estoy muy contento porque lo que pensamos que se podía hacer, lo logramos con una gestión honorable y con el esfuerzo de todos los empleados«.

Todo por hacer

«El gran problema en nuestra ciudad es la distribución y potabilización de agua porque tenemos una planta de 50 años, para cuando Gaiman tenía 5 mil habitantes y ahora tiene 16 mil», comparó. «Fueron muchísimos años de abandono, así que estamos trabajando mucho en eso, presentando proyectos en el plan Argentina Hace y algunos trabajos con la Provincia«, aseguró el intendente.

«Este 2021, va a estar enfocado en mejorar los servicios que presta el municipio», aseguró James, quien se enfocó también en el gasto social que requiere el contexto de crisis sanitaria y económica. «Estamos muy complicados. La gente no tiene trabajo, tenemos gente aislada y por eso la parte social nos lleva mucho trabajo y esfuerzo«, reconoció.

Preocupación por los contagios

Por estos días, Gaiman cuenta con un total de 630 infectados desde que se inició la pandemia, con 20 casos activos. Muchos de estos se dieron en los últimos días; sobre todo, después de las fiestas de fin de año y del boom de las fiestas clandestinas. «Para nosotros, es mucho. Nuestro pueblo tiene una gran cantidad de personas longevas y es muy peligroso porque los jóvenes se contagian y quizás no tienen problemas, pero van a ver a sus abuelos o tíos y ellos tienen muchos problemas«, alertó.

«Tenemos el agravante de que dependemos del hospital zonal de Trelew, que está con su camas totalmente colapsadas y hay pocos respiradores. Estamos muy preocupados porque ya estamos en una situación muy crítica sanitariamente«, lamentó el dirigente radical.

En ese sentido, James comentó que la actividad económica fue muy afectada por la pandemia. «Nuestro pueblo no tiene ni una empresa privada que esté trabajando. Se mantiene gracias a la producción del valle y con el turismo, que al estar todo cerrado se vino muy a pique. Tuvimos casas de té emblemáticas que han cerrado y otras se mantienen a duras penas. Sumado a eso, se bajó un 40% la coparticipación por la Provincia», resumió y agregó: «Pero pudimos salir adelante y eso significa que haciendo las cosas bien y actuando a conciencia, las cosas se pueden mejorar«.

Según el jefe comunal, en Gaiman hay un Parque Industrial que está prácticamente vacío e inscribirlo para recibir apoyo de mantenimiento fue uno los pasos en el ordenamiento del municipio. «Estamos abiertos a la inversión privada, creemos que este país no sale adelante sin ella. A todas las personas que quieran invertir aquí, queremos darles una posibilidad, para que nuestro pueblo tenga empleo genuino. En el país no se le da la posibilidad a los privados y, si se le da, se lo mata con impuestos. Hay que revertir esa situación», evaluó James.

Volver a las raíces

James tiene ascendencia galesa, que data del siglo XIX. «Mis familiares vinieron en 1865 al desierto de la Patagonia porque en Gales no tenían libertad y eran atosigados por los ingleses. Hicieron 140 kilómetros de canales de riego a pico y pala porque como no llueve es la única forma de poder cultivar y hoy día tenemos problemas para su mantención. Tenemos que volver a las raíces de nuestros antepasados. Tenemos que buscar el espíritu pionero y salir adelante con esfuerzo», destacó.

Para finalizar, James se mostró optimista, pese a las dificultades de la gestión: «Me siento realmente feliz porque cuando estaba afuera de la política consideraba que se podían hacer las cosas de forma transparente y honorable y lo logramos; o sea, nada está perdido. Hay que ponerse al frente, poner el cuero duro y marcar el rumbo. De esa forma, se puede salir, con el esfuerzo de todos».