Dulce Flor, la mermelada godoicruceña que fue premiada en Londres

“Mi abuela repartía pétalos de rosas como premio cuando ayudábamos en su casa. Ese sabor quedó en mi memoria y un día decidí ir a buscarlo”, contó su creadora, Florencia Piffaretti.

Con seis años de trayectoria en la provincia de Mendoza, Dulce Flor aceptó el desafío de participar del prestigioso World’s Original Marmalade Awards & Festival, realizado en Londres, Inglaterra.

La pyme godoicruceña recibió una mención de honor en la categoría «Artisan & Small Producer Awards», por su mermelada de pomelo con pétalos de rosa e impresionó a los jueces con su apariencia, color, consistencia, aroma y sabor.

En este certamen internacional -que data del 2005- participan más de 3.000 fabricantes de 40 países del mundo. Esta edición fue la primera que contó con una empresa argentina entre sus concursantes.

“Conocí esta competencia a través de unos colegas de España que tienen el Museo de la Confitura, ellos ya han participado y han ganado algunos premios. Y este año me decidí a participar y envié muestras a través de una persona que viajó a Inglaterra”, le contó la emprendedora Fernanda Piffaretti a Noticias d.

Pero inscribirse y pagar el arancel para ser parte de este festival de mermeladas no fue nada sencillo. “Cuando tuve que hacer el pago fue justo con el cambio de Gobierno nacional -en el marco de los impuestos para la compra de divisas- y no podía realizar el pago por ningún medio. Finalmente, conseguí un contacto de un amigo para poder hacerlo y ser concursante”, explicó Fernanda.

Esta edición fue especial porque no pudo realizarse como en otros años. Sin embargo, las competiciones fueron un gran éxito y los ganadores se anunciaron en una ceremonia privada.

 “Estamos muy contentos de haber ganado este premio en el marco de una competencia mundial muy importante. Hemos estado haciendo nuestra mermelada durante cuatro años y nuestros clientes siempre nos han dicho que es una de las mejores que jamás hayan probado. ¡Es genial tener un premio para demostrarlo!”, contó Piffaretti.

“Creemos que el secreto de nuestra deliciosa mermelada es que, a través de la alquimia que ocurre en la combinación de las flores y las frutas, generamos una experiencia poética, que la hace única por su elaboración artesanal y la transforma en un producto gourmet de alta gama”, agregó Fernanda.

Inspirada en un recuerdo

“Mi abuela repartía pétalos de rosas en vez de dulces a sus nietos a modo de premio cada vez que le ayudábamos en su casa. Ese sabor quedó en mi memoria y un día decidí ir a buscarlo”, contó Fernanda.

Así surgió en el 2014 Dulce Flor, una delicada línea de confituras con pétalos de flores naturales y frutas frescas. El objetivo fue desarrollar una propuesta innovadora, conservando en un frasco los evocadores sabores y aromas de las flores.

La pyme local cuenta con una pequeña plantación agroecológica de flores y una fábrica artesanal, además de una gama de sabores propios para atender la demanda de una nueva generación de clientes, que quieren aunar calidad, nuevas sensaciones y salud.

Fernanda cultiva sus rosales y jazmines y, una vez que florecen, cosecha los pétalos y comienza a mezclarlos con diferentes frutas. “Busco encontrar qué fruta marida bien con cada flor”, definió.

Actualmente, elabora seis tipos de mermeladas, con rosas rojas, jazmines del cabo y azafranes. Se trata de recetas cuidadosamente elegidas y testeadas. Los gustos que incluyen pétalos de rosa van acompañados de pomelo, manzana, frutilla y uva malbec. El jazmín va con peras y el azafrán, con mandarina.

Es un producto 100% natural sin aditivos ni conservantes y su producción es totalmente artesanal”, comentó la diseñadora gráfica. Cada mermelada tiene bajos contenidos de azúcares y nutricionalmente tiene antioxidantes suministrados por las flores.

Estas mermeladas pueden encontrarse en Sol y Vino Mendoza, LeRoro Cakes Buenos Aires, Bodega Lagarde, Shop Gallery Aeropuerto Mendoza, Shop Gallery Sheraton Mendoza, Bodega Decero, La Pausa, Shop Galería Aeroparque Buenos Aires.

Contenido provisto por: Julieta Gulino