María José Marino es una diseñadora industrial especializada en gráfica, que está tratando de pasar esta cuarentena de la mejor manera posible.

Está claro que su pyme -como la inmensa mayoría en esta compleja situación- está sufriendo la recesión económica que trajo aparejada la pandemia.

En esta línea fue que María José pensó distintas maneras de reactivar su emprendimiento y encontró en el trueque un camino allanado.

“El problema que tenemos ahora es que la recesión económica por la cuarentena fue caótica y paró todo. Las empresas no tienen espalda económica para pagar este trabajo, porque no pueden vender el producto, porque no está bien comunicado. Ahí es donde aparezco yo”, contó María José.

“Me puse a pensar de que manera podía reactivarme. Si bien me hace falta el ingreso en efectivo, tengo otro ingreso porque soy docente universitaria, se me ocurrió que una empresa me puede hacer un trueque: yo le doy mi trabajo por algo que yo necesite o hacerme un plan de pago, así ambas partes salen ganando”, aseguró.

María José diseñó un flyer y comenzó a pasarlo por diferentes grupos de WhatsApp. Esto fue muy bien recibido, al punto que ya tuvo varios contactos y ofrecimientos.

“Desde que lo publiqué me fue bastante bien, ya que 8 empresas me llamaron. Por ejemplo le voy a hacer un trabajo a una mueblería y ellos me pagan con un mueble que yo necesito; una panificadora me va a pagar con productos que yo puedo frizzar y que compraría si me pagaran con dinero y así ponemos en marcha la rueda económica para salir de esta situación”, contó la emprendedora.

Este parate en los trabajos de la pequeñas y medianas empresas agudiza el ingenio, pero para María José también hace resaltar la solidaridad: “Si no trabajamos, esto se transforma en una bola de deudas que no la paramos más. Hoy necesitamos ayudarnos entre todos, no es una opción, es lo que tenemos que hacer”.