Mumi, la historia del escalofriante muñeco maldito de Godoy Cruz

Un grupo de personas se dedica a recolectar historias paranormales y a «limpiar» objetos.

Mumi era el bebote de una nena que se enfermó y murió cuando tenía seis años”, cuenta Gastón Zúñiga. Creer o reventar, hay historias malditas en todos lados y algunas de ellas son recopiladas por él y por otras 5 personas: Gabriel Vélez (del equipo de “Alerta Roja”), David Mercado, Alejandro Chávez, Alejandro Lucero y Alejandro Villalonga (de “Zona Paranormal”). La de Mumi es una de las más terroríficas y ocurrió en Godoy Cruz.

Hace seis ellos años se encargan de recopilar historias paranormales ocurridas en Mendoza. Al estilo del matrimonio Warren, visitan casas, limpian objetos e incluso aseguran haber estado presentes en tres casos de exorcismos. Sí, la realidad y la ciencia ficción a veces parecen lo mismo, solo que la mayoría lo desconoce. Y muchos prefieren que siga siendo así.

Por las redes sociales transmiten cada martes un programa de radio llamado “Alerta Roja” donde cuentan sus experiencias y hasta muestran algunos de los lugares que han debido visitar. Una de esas historias tuvo lugar en Godoy Cruz.

Parte del grupo que recolecta las historia paranormales y las difunde

Mumi, el bebote maldito

Según contó Gastón, Mumi fue encontrado en una casa de Godoy Cruz adonde fueron convocados por la familia que lo tenía. Este era un bebote de una niña de 6 años que había enfermado y se había muerto. Los padres decidieron cremar el cuerpo y las cenizas fueron guardadas en una urna. Sin embargo, durante un temblor, esta se cayó y se rompió.

Parte de la colección de «muñecos malditos» que tiene este grupo de cazadores de lo paranomal de Mendoza

Ante la desesperación y el dolor de lo ocurrido, la madre juntó las cenizas y las guardó en el primer lugar que se le ocurrió. Un bebote que había sido el juguete preferido de la niña. En ese momento parecía buena idea. No lo fue.

Al poco tiempo, la familia debió vender la casa y mudarse a un departamento. En ese nuevo lugar comenzaron a ocurrir cosas muy extrañas que la familia atribuyó al bebote. Por ello tomaron la decisión de adquirir una nueva urna y entregar a Mumi a este grupo de personas. “David hizo la limpieza y Mumi ahora está con nosotros”, explicó Gastón al diario Los Andes, al hacer referencia a uno de los tantos objetos que hoy forman parte de su propia colección de objetos que nadie quiere tener en sus hogares por temor y terror.

Contenido provisto por: Daniel Calivares