Mariela logró sobreponerse a la cuarentena y mantuvo con vida su emprendimiento.
Cuando alguien habla de Amora Moda, automáticamente surge el nombre de Mariela Gómez. Es que esta emprendedora armó un universo entre las prendas que enloquecen a las mendocinas.
Lejos del estilo frío de una casa de ropa normal, Mariela creó un estilo especial para atender a las clientas que van a su showroom: personalizado y con tiempo. Es por eso las atiende bajo la modalidad de turnos, para que vayan y tengan todas las prendas a disposición.
Pasen, vean y conozcan el mundo de Amora Moda.
–¿Cuándo comenzó tu interés por el diseño?
-Desde la adolescencia, motivada por la búsqueda de la sensibilidad artística, vinculada a la imagen y al diseño de indumentaria.
-¿Cómo fue tu formación?
-Mi formación se moldea a partir de la conexión lograda con cada una, que permite empatizar con las distintas sensaciones que genera el sentirse bien con su imagen a través de una prenda.
–¿Cómo construís una colección?
-Siguiendo la tendencia europea, que marca el estilo por venir. De esa manera se empieza a jugar con combinaciones de colores, estampados y géneros adaptados a nuestros gustos, estilos y cultura propia.
–¿Qué cosas te generan inspiración? ¿Quiénes son tus referentes?
-La inspiración surge muchas veces del feedback que me dan mis clientes. Actualmente a través de las redes sociales tenemos un sinfín de referentes llamados influencers, los cuales permiten agilizar el acceso de lookbooks de temporadas.
-¿Cuáles son las tres prendas que no pueden faltar en ningún ropero?
-Un buen jean, remera blanca y blazer.
–¿Cuál es tu color insignia?
-Turquesa vintage.
-¿Cómo es tu equipo de trabajo?
-Selección y comercialización de colecciones, a mí cargo y manejo de redes llevado a cabo por community manager. Infraestructura y armado con personal idóneo.
-¿De que otra forma vendes tus prendas?
Tengo showroom y me pueden encontrar a través del Instagram @amora.indumentaria y el Facebook Amora Moda
–¿Qué adversidades tuviste que enfrentar?
-Mi momento más difícil es el actual. Con la pandemia perdí mi valor agregado, que es elegir presencialmente cada una de las prendas de mi colección.
–¿Qué próximos proyectos tenes pensados?
-El traslado de AMORA SHOWROOM a un nuevo espacio de encuentros, cuya apertura es inminente.