Toda esta vida vivió en la calle en un barrio de Luján de Cuyo, siendo invisible para todos, su mirada pedía una familia que le brinde un hogar y mucho amor.
Un día paso una mujer y la vio durmiendo entre las hojas, totalmente pelada por la sarna que tenia, muerta de miedo, no se dejaba acariciar. Fue a preguntar a los vecinos si era de alguien pero nadie supo decir y sin pensarlo la cargo al vehículo y empezó el cambio para ella.
El veterinario que la reviso por primera vez expreso que tenia mas de 12 años por lo menos, que es una perra muy viejita y que se notaba en su cuerpo la cantidad de crías que tuvo. Empezó con tratamiento para la sarna, y enseguida empezó a crecerle el pelo y a engordar. Su mirada cambio, sus ojos eran felices.
Solo le falta una familia para terminar esta historia, una familia que pueda cuidarla en los años que le quedan, que pueda cuidarla y mimarla.
El punto final lo haces vos si la adoptas! 2616991206.