Promueven los valores del prócer para preservar su memoria: conocé al Instituto Belgraniano de Maipú

A 250 años de su nacimiento y a 200 de su muerte, un grupo de personas trabaja para resaltar el legado del prócer argentino.

Este año se conmemora el bicentenario de la muerte del general Manuel Belgrano y en Maipú hay un grupo de personas que trabaja para mantener viva su memoria.

Se trata del Instituto Belgraniano, que tiene una filial en el departamento del que participan alrededor de 30 personas de distintas edades y profesiones, a quienes los une el objetivo de divulgar los valores del prócer argentino. 

Entre las enseñanzas que buscan promover y mantener vigentes se destacan el amor a la patria y a los símbolos patrios; difundir la historia de Belgrano y su obra militar, económica, política y educativa.

“Buscamos promover sus ideales, su impronta de un ser que pensaba más allá de sus vivencias, programando un futuro con grandes ideales. Fomentando la igualdad y fraternidad y rescatando los valores de las personas. Sus ideales en la parte económica, luchando por una educación gratuita que llegue a todos los niños y el crecimiento de la mujer como la persona que educaba a los futuros ciudadanos”, contó a Noticias d la presidenta de la institución, Ana María Pesle. 

El papel de Manuel Belgrano 

Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano murió el 20 de junio de 1820. Vivió 50 años, tiempo suficiente para convertirse en una de las figuras más importantes de la República Argentina que dejó en gestación.

A 250 año de su nacimiento y a 200 de su muerte, el Gobierno Nacional, a través del Decreto 2/2020, publicado en el Boletín Oficial el 3 de enero, determinó el 2020 como el “Año del General Manuel Belgrano”, resaltando su destacada actuación pública en el proceso que condujo a la independencia de nuestro país en el marco de las luchas por la emancipación sudamericana.

Sin dudas, tuvo un papel clave en la historia de nuestro país y su pensamiento fue muy visionario para la época. “Tenía una conciencia clara de lo ‘patrio’. Precisamente, buscaba conservar el patriotismo, su preocupación por una patria libre, sustentable y progresista, segura de sus ideales y de la formación de ciudadanos probos y con ansias de superación en una visión global que vincula estrechamente el progreso del hombre y de su patria”, resaltó Ezequiel Cánepa, docente y miembro de la institución maipucina. 

Además, rescató que Belgrano tiene muchas facetas “incluso hasta desconocidas”, indicó. “Un plan constitucional (casi olvidado) y político (compartido con San Martín), un proyecto económico fisiócrata; el fomento de dos aspectos inherentes al hombre, la libertad y la igualdad; la lucha por una educación gratuita”, dijo el docente. 

“También el respeto a la mujer como par al hombre. Recordemos que Belgrano tuvo mucha ayuda de valientes mujeres en el campo de batalla, cuya acción fue fundamental en la Batalla de Tucumán”, agregó Cánepa. 

Unidos por la historia

Al Instituto Belgraniano de Maipú lo integran docentes en ejercicio y jubiladas, estudiantes universitarios, comerciantes, profesionales y artistas del departamento dictan charlas y conferencias en las escuelas e instituciones durante el año, como una forma de divulgar las ideas del General. Además, se encargan de realizar donaciones de banderas de mástil a escuelas del departamento.

Previo a la pandemia de Covid-19, se reunían al menos una vez al mes, en las instalaciones del Museo del Vino y la Vendimia (Chalet Giol) para confraternizar, dialogar y consensuar todos los proyectos y acciones a seguir. 

“El aislamiento nos ha llevado a tener que buscar una nueva forma de estar en contacto y a través del grupo de WhatsApp y luego charlas de formación y capacitación en temas belgranianos por zoom, tanto propios como de otras instituciones”, explicó Cánepa.

A MANUEL BELGRANO
Miraba el sol naciente, en sus días borrascosos
estaba motivando el futuro, en esos días de revolución y misterio.
Un destino de sueños no fugaces, ante la invasora sombra.
No habían rosas declinantes, anter el rocío rojizo y oscuro.
Alentaba a sus guerreros, en la brisa azul celeste.
Se incendiaba el anochecer de sueños, de estrategias en su destino de fuego.
Fue su vida de incandescentes metas, con los pies seguros y la mente alta.
Fundando a cada paso el futuro, con gestos vivaces y firmes palabras.
Brotaba como rocío, la llama viva, el corazón ardiente de patriotismo.
Buscaba entre la incertidumbre, el árbol místico que creciera incólume
en un nuevo destino de sol y patria.
Fue y será espejo de grandeza, el emblema como ofrenda de amor
la lámpara votiva que desgrane altiva, lka cálida lumbre de justicia y honor.
Como pájaro albañol, construyendo el futuro
en la costumbre ancestral de la palabra.
Se hizo visible a través del tiempo en los colores de cielo y sol.
Fecundo en su hacer, con vivión futurista, aprisionó su sapiencia de soles nuevos, dibujando un horizonte de luz para su pueblo.
Iluminó la sombra, construyó un futuro.
 Sin límites de tiempo inundó el infinito
Conciente de su hacer profundo
dándole un nuevo futuro a la Patria.
Fue como la lumbre infinita, modigerando los tiempos
sapiencia de brisa recorriendo los valles.
Pasión desbrozando en silencio
de pueblos originarios construyendo el desierto
formando valles der agua ycielo
de verdes ilusiones, iluminadas por dentro.
                                                      Ana María Pesle
Contenido provisto por: Rocio Sileci