Un largo camino: la historia de la profesora que motiva a sus alumnos a cumplir sus sueños

Rocío es una profe de danza de Maipú que alienta sus alumnos y alumnas a lograr sus objetivos. Dos bailarinas de ellas ganaron becas en el extranjero.

Rocío Lucero comenzó su camino en la danza cuando tenía 5 años y su madre la llevó a una clase por ser bastante inquieta. Al principio solo tomaba clases de danza clásica y español, pero con el tiempo incursionó en el jazz, el contemporáneo y el urbano.

La carrera como profe empezó a muy corta edad “tenía 13 años y daba clases de coreografía en mi casa de barrio sin preocupaciones de lo monetario ni nada, sino que lo hacía por el puro placer de enseñar y desde ahí nunca pare”, confiesa Rocío.

Rocío en su adolescencia como bailarina clásica.

Pero las cosas no siempre fueron color de rosa, en su adolescencia se dio cuenta que para dedicarse a la danza tenía que dedicarle más tiempo, tiempo que quería pasar con sus amigas como cualquier chica de su edad. Fue ahí cuando su mamá le enseñó un gran valor: el compromiso y la responsabilidad.

Cuando la joven no quería asistir a sus clases, su madre le preguntó que si era por pasar tiempo con sus amistades y le negó que dejara de hacer danza por ese motivo. Al día de hoy la ahora profe de Maipú afirma: “Agradezco a la vida y a mi familia que no hayan dejado abandonarlo porque me hubiera arrepentido toda mi vida”.

La profe sigue tomando cursos y formandose, muchas veces para enseñar las demandas actuales como lo urbano.

Su academia funciona hace casi 10 años y actualmente funciona en Rivadavia 1078 – «El Olé de Triana». Gracias al entrenamiento, la constancia, la voluntad y el corazón que les enseña a sus alumnos, dos bailarinas han logrado ganar dos becas internacionales para el 2022.

Martina logró una beca para los programas de estudios en Uruguay y Los Ángeles. Mientras que Yasmín obtuvo su beca para el programa de estudio de Barcelona Dance en España. A los alumnos que entrena diariamente les repite que si tienen el sueño de ser bailarines pueden hacerlo, pero que si no trabajan por ello solo quedará en un sueño.

“La danza no solo es bailar, tiene una historia que hay que estudiar, escuelas y técnicas que tenemos que conocer. Si te dedicas a la enseñanza necesitas de pedagogía y didáctica”, agrega Rocío.

Además, remarca que para que la gente considera a la danza como una profesión más hay que respetarla desde el trabajo y esfuerzo. Para Rocío la clase del éxito si uno quiere ser profesional de la danza es seguir estudiando y aprendiendo, pero sobre todo nunca dejar de soñar.

Contenido provisto por: Melisa Sbrocco