El ex titular de la Selección Argentina recorrió un frondoso camino para llegar a consagrarse en el máximo nivel del fútbol de nuestro país y del mundo. Sin embargo, su sueño es retirarse en el club donde todo comenzó.

El mendocino Enzo Pérez debutó en primera en el club del que siempre fue hincha: Deportivo Maipú. Si bien la carrera del futbolista había comenzado tiempo atrás, en el barrio San Eduardo, el club Petroleros y en Banco de Mendoza, su arribo a la primera fue como volante en Deportivo.

Comenzó a jugar allí cuando tenía 11 años, con ayuda del Colorado Averza y Rubén Feriozi. A los 15, Enzo ya había logrado meterse de lleno en la Primera División, pero poco después emigró a Godoy Cruz. 

Jugó la liga mendocina al frente del Tomba y más tarde, continuó su carrera en Estudiantes de La Plata donde, junto a su equipo, salió campeón de la Copa Libertadores en el 2009.

Más tarde comenzaría su carrera en el exterior. Enzo cerró con el SL Benfica y se mudó a Portugal, pero poco después volvería a préstamo en Estudiantes durante una temporada, para luego regresar al Benfica.

Después, el mendocino jugó para el Valencia durante dos temporadas y regresó a Argentina para consagrarse en River Plate, donde actualmente se destaca. Imposible dejar de mencionar su paso por la Selección, donde jugó en los mundiales de Brasil 2014 y Rusia 2018.

En reiteradas ocasiones Enzo expresó sus ganas de retirarse del fútbol en el club que más ama. Incluso su padre, Carlos, confirmó alguna vez: “El único deseo que tenemos, yo como papá y él como jugador, es que termine en el Deportivo Maipú y salga campeón, sería la frutilla del postre”.