Los animales callejeros pasan horas y horas en búsqueda de un poco de comida, un refugio para descansar en los días calurosos y, lo más importante, en búsqueda de un poco de agua fresca para hidratarse.

Las mascotas sufren golpes de calor y se trata de un fenómeno circulatorio que más afecta a los viejitos y a los cachorros. Los animales no tienen autocontrol.

Entre los síntomas se encuentra el jadeo, aumento de la temperatura y hasta puede provocarse un desmayo.

Tarrito de agua en las veredas

Rescatistas de la zona promueven esta iniciativa que surge todos los años en esta época de calor intenso.

La idea es que los vecinos puedan aportar su tarrito de agua fresca en la vereda para todos aquellos animales que viven en la calle. Cuantos más se sumen, con más frecuencia encontrarán agua potable.

Los vecinos pueden atarlo a un árbol bajo la sombra o dejarlo cerca de una acequia, donde ellos puedan tener acceso.

¡Sumate, ayudá y dejá tu tarrito de agua en la vereda.