Esmery Martínez no se sorprendió al escuchar su nombre como la quinta selección en la segunda ronda del draft de la WNBA. Está lista para unirse al equipo de las Liberty de Nueva York. «He trabajado arduamente para este momento, siempre fue mi sueño y lo esperaba», expresó Martínez.

Aunque no sabía con certeza en qué posición sería elegida, Esmery Martínez presentía que iría al equipo de Nueva York o al de Phoenix.

“Viajo el día 23 hacia Nueva York para reunirme con el equipo y creo que alrededor del 28 comienza el campo de entrenamiento. Estoy lista para luchar por hacer el equipo”, añadió Martínez, una delantera de 6-2 de estatura.

Martínez expresó su felicidad por tener la oportunidad de practicar y aprender de jugadoras a las que ha seguido, como Sabrina Ionescu y Breanna Stewart.

“Estoy preparada tanto física como mentalmente. Tengo que seguir entrenando, prestar atención a mi cuerpo y hacerme cargo de mi alimentación y preparación. En la universidad, tenía un equipo de apoyo y un plan, pero ahora como profesional, tengo que ser más independiente”, dijo.

En la actualidad, las Liberty de Nueva York tienen una nómina de 19 jugadores, incluyendo 10 de primer año, lo que sugiere una competencia intensa por los puestos.

“Solo tengo que salir, demostrar lo que tengo y mostrar que merezco estar en la liga”, declaró Esmery, natural de Hato Mayor, quien se unió a la selección nacional en 2018 y ha participado en varios torneos, incluyendo los Centroamericanos y del Caribe del año pasado, donde República Dominicana obtuvo la medalla de plata.

Mostró su alegría por la selección de su compañera en la Universidad de Arizona, la española Helena Pueyo, quien fue elegida en el puesto 10 de la segunda ronda (22 en general) por Connecticut Sun.

“Me alegré más por ella que por mí, somos muy cercanas, es una chica de gran corazón”, declaró.

Martínez fue parte de un sorteo de talentos que se espera que sea histórico para la liga de la WNBA.

Encabezado por Caitlin Clark, quien estableció récords de anotación en el baloncesto universitario con Iowa, el draft de 2024 podría recordarse como el que transformó a la WNBA si las jugadoras pueden, con su presencia y actuación, aumentar el interés general y las clasificaciones televisivas, como lo hicieron en el nivel universitario anterior.

De por vida

En 152 partidos, Martínez terminó con promedios de 10.4 puntos, 8.3 rebotes, 1.6 asistencias y 1.6 robos de balón.

En la temporada de 2020-21, su segunda y última con West Virginia, tuvo medias de 13.6 puntos y 11.6 rebotes.

Terminó su carrera en la NCAA con 1,580 puntos, 1,267 rebotes, 246 asistencias, 244 robos de balón y 106 bloqueos. Anotó el 46 por ciento de sus lances de campo y el 72 de sus lances libres.