Cuenta la leyenda que hace muchos años ocurrió un fatal accidente dentro de una mina de carbón, en los prolíferos yacimientos carboníferos de Río Turbio. Un trabajador murió producto de un derrumbe y su esposa acudió al lugar desesperada. Pese a las advertencias, ella ingresó a la mina a socorrer a su esposo, pero la tragedia se duplicó: otro derrumbe ocurrió en ese instante y ella también murió aplastada.

Desde ese día -cuenta la leyenda-, el espectro de la mujer recorre la mina. La llaman «la viuda negra«. Como toda leyenda, tiene distintas versiones. La más extendida apunta a que el mismísimo diablo tomó a la viuda negra como amante. El fruto de esa relación es nada menos que el carbón de la mina.

La prohibición de las mujeres en la mina

La leyenda advierte que si una mujer ingresa a la mina, la viuda negra se pondrá celosa y su vientre se secará. De esta forma, dejará de proveer de carbón a la mina y, con ello, se abrirían las puertas a mil calamidades para el pueblo. Por ello, las mujeres tienen (o tenían) el ingreso prohibido a la mina.

Hay (o había) un solo día en que las mujeres tenían permitido el ingreso: 4 de diciembre. ¿Por qué? Es el día de la Virgen Santa Bárbara, patrona de los carboneros (en realidad, patrona de la artillería y de otras profesiones ligadas al fuego). Ese día, la virgen protege a las mujeres y la viuda negra no se pone celosa o no se entera o no se le seca el vientre.

Leyenda machista

Durante muchos años, muchas mujeres han intentado romper la maldición, acudiendo a las autoridades locales de turno e incluso a la justicia. Estas mujeres entendieron que la cosa no iba tanto por el lado de la viuda negra, sino por el lado del machismo, en la lógica de hombre proveedor y mujer dedicada a las tareas hogareñas.

La ingeniera química Alba Caballero fue profesora de la universidad en Río Turbio y entre el ’86 y el ’92 estuvo en YCRT. En una entrevista con el sitio Cosecha Roja, explicó: «Te hablan de la viuda negra, pero esa versión es diferente según la gente con la que hables. Por eso, siempre considero que es una privación ilegal del derecho del trabajo, inconstitucional, en contra de las mujeres y que tiene que ver con un tema de competencia».

«Lo que pasa es que la misma gente de Río Turbio avala esto con su silencio o cuando los 4 de diciembre muchas mujeres van a visitar la mina aceptando la dádiva y el comportamiento machista, siendo que ellas han tenido un rol fundamental en la lucha de la comunidad y en la reivindicación de los derechos de ellos en la cuenca carbonífera», completó Caballero.

El fin de la maldición de la viuda negra

Hace apenas una semana -a mediados de octubre de 2023-, se ha dado un paso significativo hacia la igualdad de género en la industria minera. Luego de años de lucha, finalmente las mujeres tienen acceso a la mina para desempeñar tareas que, hasta el momento, les estaban vedadas.

Las primeras mujeres en ingresar a la mina fueron María Belén Millanahuel, jefa de Seguridad de Mina; Beatriz Paz, enfermera; Karina Huala, martillera; y Vanina González, chofer de Camiones.

En realidad, la primera mujer en trabajar en la mina fue Carla Rodríguez, quien ingresó hace varios años. ¿Cómo lo hizo? De manera involuntaria: cuando ingresó a trabajar, previo a la Ley de Identidad de Género, tenía DNI de varón.