Recreo no tuvo casos de Covid-19 hasta el momento; se acataron las medidas de cuarentena estrictas, se restringió toda la actividad e incluso se desarrollaron centros de aislamiento que no llegaron a ser utilizados. A medida que avanzaron las semanas, el municipio pudo comenzar a flexibilizar actividades -especialmente las comerciales- aunque permanece la obligatoriedad en el uso del tapabocas y se repiten los controles vehiculares. “Estamos tratando de volver a una normalidad, quizá diferente, pero normalidad”, expresó el intendente Omar Colombo a Noticias d.

El jefe comunal ponderó la actitud de los vecinos en la contención del avance del virus: “Se debe a que tomaron en cuenta lo que se les pidió”. Ahora ruega extremar los cuidados, porque con la apertura ya no será posible realizar el control eficaz de los primeros tiempos. Por eso, resaltó la importancia de que la población tome conciencia y sea aún más responsable.

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La “nueva normalidad” recreína

La economía local se vio afectada por la pandemia. Si bien las principales industrias de Recreo siguieron trabajando, por ser alimenticias y consideradas esenciales, un sector importante como el comercial -incluyendo pequeños negocios, oficios y profesiones independientes- se vieron prácticamente parados. “Tuvimos una gran preocupación por los comercios”, comentó el Intendente y señaló que dispusieron de ayuda, pero que la mayoría ya está reactivando por sus propios medios y trabaja a buen ritmo. “Hoy podríamos decir que estamos en un 85% a pleno”, calculó Colombo.

La recaudación cayó sensiblemente, por lo que recibieron fondos provinciales, de coparticipación y de un fondo extra por la pandemia. Colombo entiende que parte de la crisis económica se sentirá fuerte durante la reapertura, especialmente en los sectores más vulnerables de la ciudad. “Nuestro trabajo desde el punto de vista social se va a intensificar”, afirmó el Intendente y agregó que, especialmente, en lo que hace al apoyo a merenderos y comedores populares para niños y adultos.

Asimismo, también se están retomando los proyectos de obras públicas, lo que genera más empleo y consumo. Hay un plan de pavimentación de 26 cuadras que ya está ejecutados en un 50%. “En Recreo hace años que no había un plan así de ambicioso”, remarcó con orgullo.

La calidad de vida, foco de la gestión

Colombo pasó toda su vida en Recreo; el interés por su comunidad lo acompaña desde joven. Es contador público de profesión, también ejerció la docencia y realizó actividades voluntarias en parroquias, cooperativas escolares y clubes, algunas vinculadas con Colón, el club de sus amores.

Tras unas primeras experiencias políticas entre 1995 y 2003, se retiró de la actividad pública, a la que regresó recién en 2016 como candidato a intendente del Frente Progresista, convencido de que “en la ciudad había que hacer un recambio de personas”. Según él, “un dirigente no debe estar más de dos períodos. Que descanse y vuelva si quiere. La alternancia política y de figuras es fundamental”.

Está al frente de la ciudad desde diciembre de 2017 y tiene muy clara cuál quiere que sea su impronta: “ Las obras y el mejoramiento de la calidad de vida de los vecinos desde todo punto de vista”. En general, desde más calles pavimentadas hasta más espacios de participación ciudadana e intervención cultural, que lleguen a los barrios.

Colombo reconoció que a los recreínos les cuesta sentirse dueños del espacio público, disfrutarlo y cuidarlo, y que él apuesta en su gestión a revertir eso con políticas concretas. Algunas de ellas ya están en curso, aunque pausadas por la pandemia. “No todo es infraestructura. Todo lo que tiene que ver con la cultura y la promoción de los derechos es una inversión, no es un gasto”, concluyó.