La llegada del frío podría aliviar la presencia del mosquito Aedes aegypti, transmisor del dengue, en el Área Metropolitana de Buenos Aires. Aun así, Los expertos advierten sobre la necesidad de mantener precauciones debido a la supervivencia de los huevos y las posibles lluvias en el horizonte.

El mal tiempo, que se espera dure cinco días, trae consigo una disminución en la actividad del mosquito, pero la eliminación de criaderos de agua estancada y el uso de repelentes sigue siendo crucial para prevenir nuevos casos de la enfermedad.

El brote de dengue en la región ya ha registrado cifras alarmantes, con 230 mil casos y 161 muertes, por lo que la precaución y la acción preventiva son fundamentales incluso ante el descenso de las temperaturas.

Las autoridades y los expertos instan a la población a mantenerse alerta y continuar con las medidas de prevención para evitar una nueva proliferación del mosquito y controlar la propagación del dengue en la región.

Se recomienda a los residentes del AMBA eliminar recipientes con agua estancada, instalar mosquiteros, usar repelentes y vestir ropa que cubra la mayor parte del cuerpo como medidas efectivas para reducir el riesgo de picaduras de mosquitos.

La llegada del frío puede ser un respiro, pero la lucha contra el dengue continúa.