El Dr. Matías Fernández Viña es un joven profesional médico de nuestra ciudad que ha trascendido las fronteras de San Nicolás con su trabajo. Es Médico, Cardiólogo y experto en Medicina Regenerativa y Terapias Biológicas Avanzadas.

Entrevistado por Noticias d, habló sobre el trabajo del profesional médico en el actual contexto de la pandemia. También se refirió a cómo el Covid ha afectado la salud mental y física de las personas.

“Dios nos puso a los médicos en el camino de los pacientes, para dar lo mejor que podemos en este mundo”, señaló.

-¿Cuándo comenzaste a interesarte por la salud?

-Crecí desde chico rodeado de las Ciencias de la Salud gracias a mis padres. Y la realidad es que siempre me sentí interesado en la Medicina, pero desde siempre me gustaron las Ciencias Médicas.

– ¿En tu familia alguien más se ha dedicado a la salud?

-Mi abuelo Roberto fue Médico, mi padre Roberto es Médico y mi mamá Liliana es Bioquímica. Tengo 3 hermanos más que son Médicos.

-¿Por qué elegiste tu profesión? ¿Qué te motivó a elegir este camino?

-Elegí la Medicina Regenerativa porque me genera motivación permanentemente el querer entender y descifrar como es la regeneración de los órganos y los tejidos.

De esta rama me motiva saber que hay opciones mucho más que interesantes y eficaces, antes que un paciente llegue a una cirugía o se someta a un tratamiento farmacológico que no le resuelve el problema al 100%.

-¿Cuál es tu especialidad? ¿Por qué la elegiste?

-Mi especialidad es la Cardiología. La elegí porque dentro de la clínica, es un área que me interesa mucho. No obstante, posteriormente de haber terminado la especialidad, me dediqué mucho más a una rama que aún no existe como especialidad, que es la Terapia Celular Avanzada y la Biología Molecular.

-¿Cuál fue tu primer trabajo?

-Mi primer trabajo fue como médico general en una empresa de Medicina Laboral en Rosario y como médico de guardia externa, en la Clínica San Nicolás.

-¿Dónde trabajás actualmente?

-Actualmente trabajo en mi Instituto de Medicina Regenerativa llamado Regenerón, en San Nicolás. También me desempeño como coordinador de la Carrera de Medicina de la Universidad Abierta Interamericana de Rosario.

A la vez, soy médico consultor en distintas empresas de Medicina Regenerativa en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y en el exterior (Francia y Colombia).

-¿Cuáles son tus referentes en el área?

-Mis referentes son los médicos del F.C. Barcelona, Dr. Lluis Orozco y Dr. Robert Soler, con quienes tuve la oportunidad de formarme en España en el 2017. También un gran amigo investigador de la Universidad de Miami, el Dr. Diego Correa, quien me capacitó en el 2015 en Medicina Regenerativa en Estados Unidos.

-¿Cómo eran tus profesores cuando eras estudiante? ¿Qué cambios ves actualmente con respecto a tu época?

-Mis profesores de la Universidad fueron excelentes seres humanos con una capacidad académica increíble. No solo fomentaban conocimientos, sino también formas y estilos de vida ideales para disfrutar ser médico. Actualmente veo una formación médica más superficial, donde hay vinculaciones políticas fuertes que pueden modificar la enseñanza en alumnos.

-¿Continuás estudiando? ¿Qué estás haciendo?

-Permanentemente. Disfruto mucho estudiar, aún siendo médico. Actualmente me encuentro realizando el Doctorado en Ciencias Médicas (PhD) con una importante investigación sobre regeneración de tejidos. Tengo la suerte y el placer de haber sido becado por la Universidad Abierta Interamericana, así que estoy pronto a terminarlo.

-¿Dónde atendés a tus pacientes actualmente?

-Actualmente atiendo pacientes en San Nicolás de los Arroyos, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y en Mendoza. Y viajo cada 45 días a Colombia a realizar procedimientos no quirúrgicos en pacientes con lesiones de rodilla, para regenerar el cartílago articular por artrosis degenerativa.

-¿Cómo es la relación que tenés con tus pacientes?

-Tengo muy buena relación con los pacientes. Es muy importante eso para mí y me agrada muchísimo.

-¿Qué es lo más complicado y lo más gratificante de tu profesión?

-Lo más complicado es encontrarse con muchos pacientes que manifiestan dolor crónico, y a su vez, informar malas noticias. No hay una fórmula para eso.

Lo más gratificante es ver como un paciente evoluciona favorablemente con los conocimientos que uno tiene para poder tratarlo y sacarlo adelante.

-¿Cuál dirías que es una de tus virtudes más destacadas?

-Mi virtud más destacada es la habilidad que siento que tengo para trabajar con mis manos. Y también siento que tengo la virtud de oír bastante a los pacientes -así sea una consulta de más de una hora- para entender su problema y evaluar una estrategia que sea ideal para esa persona.

-¿Tenés una anécdota que recordás siempre?

-Mi mejor anécdota es la de una paciente que vino a buscar en el 2017 una opción de tratamiento regenerativo del cartílago articular de la rodilla, antes de tener que someterse a una operación y tener que dejar de bailar tango con su pareja.

Hoy ellos bailan y han recuperado su calidad de vida.

-¿Qué creés que hace a un buen profesional de la salud?

-Creo que tener condiciones dignas de trabajo es fundamental para un buen desarrollo de la profesión. Pero la paciencia, el amor y la empatía son los elementos claves para ser un buen profesional.

-¿Cuáles fueron las peores dificultades que tuviste que atravesar?

-La peor dificultad fue tener internados a mis padres, al mismo tiempo, tras haber contraído Covid-19, y haberles tenido que pasar plasma de convaleciente a ambos, en habitaciones diferentes.

Previamente me tocó durante mucho tiempo trabajar haciendo guardias médicas y que no me alcanzara económicamente para llevar la vida que deseaba. Fueron 4 años que me llevaron a querer abandonar la Medicina.

-¿Qué próximos proyectos esperás realizar en el futuro?

-Mis proyectos son migrar de Argentina para poder crecer científicamente. Hay propuestas en el extranjero que estoy evaluando. Pero primero quiero terminar mi Doctorado en Ciencias Medicas.

-¿Qué desafíos enfrentan los centros de salud hoy en día?

-Creo que nos enfrentamos al desafío más importante que nos ha tocado, el cual nunca nos imaginamos, que es soportar una pandemia con un sistema de salud que no estuvo jamás preparado para esta catástrofe.

-¿Cómo ha sido la atención que brindan en el contexto de la actual pandemia?

-Hemos podido brindar una muy buena atención, gracias a que logramos establecer protocolos claves de gestión médica en la institución donde trabajo, para ofrecer nuestras mejores herramientas. Cuando un equipo trabaja proactivamente, las probabilidades de que salga todo bien, son muy altas.

-¿Cómo ha afectado la pandemia a las personas?

-Considero que la peor afección es la psicológica. La cuarentena, el desconocimiento de un virus nuevo y su forma impredecible de contagio, afectan mucho en la salud.

Nunca había visto cómo una enfermedad viral puede generar un alto impacto en la salud mental de las personas, más allá de las secuelas que pueden quedar a nivel pulmonar.

-¿Qué significa ser médico para vos?

-Creo que somos personas, con ciertas cualidades y virtudes, que Dios nos puso en el camino de los pacientes, para dar lo mejor que podemos en este mundo.

Para mí es un placer; aunque nada es fácil, me acuesto a dormir y me levanto feliz con la vocación que elegí tener para ayudar a las personas.

Cómo contactarse con el Dr. Matías Fernández Viña:

Las personas interesadas en saber más sobre el trabajo que realiza el Dr. Matías Fernández Viña, pueden ingresar a sus redes sociales: Stemcelltherapyargentina o Instagram.