El pasado domingo, en el Balneario Municipal, se llevó a cabo una plantación de árboles autóctonos, los cuales forman parte del Programa «Un Niño, Un Árbol».
El mismo se implementa desde el año pasado y consta de otorgarle un ejemplar a cada familia que inscribe a un recién nacido en Río Tercero.
En esta ocasión se reunieron quienes fueron papás en los últimos dos meses, y lo hicieron con el fin de sumar especies en un punto tan significativo de la ciudad. Con esta acción se apunta a establecer un vínculo entre los niños y los árboles desde la primera infancia, inculcándoles valores esenciales como el respeto, cuidado y preservación del medio ambiente.
En detalle, se colocaron 12 ejemplares de las especies aguaribay y talas, los cuales forman parte del patrimonio natural y garantizarán un entorno saludable para estas futuras generaciones. Con el paso de los días se sumarán los restantes, hasta llegar a los 95 que corresponden a esta parte del Programa.