El deportista impulsa este evento como un modo de agradecimiento a la patrona de la localidad: la virgen del Carmen. El tramo que separa a estas dos localidades es de 206 kilómetros y se tardarían 23 horas con 40 minutos, aproximadamente.

Zannino habló sobre este evento que tuvo su primera edición en 2019. El año pasado no se pudo realizar por la pandemia.

«Este año volvemos. Salimos este sábado 18 a las 7 de la mañana desde la parroquia de la virgen del Carmen y estaríamos llegando al rededor de las 7 a la basílica», comentó.

«Es un momento para aferrarse a las creencias. Los atletas cuando estamos corriendo y sentimos que no podemos mas, levantamos la mirada y pedimos un poco más de fuerza. En mi caso siempre le pido a la virgen del Carmen, de la cual soy devoto», explicó Zannino.

Fe y un caso que conmovió a todos

En este sentido, el atleta comentó que un caso muy particular se dio la edición pasada. «Una de nuestras atletas estaba muy mal de su cáncer, hizo un esfuerzo sobre humano para participar y pudo cumplir su deseo de entrar con la virgen en brazos a la basílica. Fue un momento emotivo», recordó Zannino. Además, agregó que ahora esta persona no solo se recuperó de su enfermedad, sino que pudo volver a la práctica del deporte.

En cuanto a Zannino, dijo que su promesa a la virgen era llevarla a tracción para que vea lo que ellos deben pasar cuando están corriendo.

«La corre-peregrinación se hace por postas. Vienen corredores de Santa Lucia, Goya, ya hay gente que nos va a estar esperando en Saladas, Empedrado. Hay una comunidad parroquial que nos va a esperar afuera de la iglesia para darnos su bendición», repasó Zannino.

Un año con mucho para agradecer

Según este atleta, es un año donde hay muchas cosas para agradecer. Desde que se pudo volver a correr, a que se pudo hacer una nueva edición del desafío de la cruz de los milagros. «Es muy importante ser agradecidos por todo lo bueno que nos pasó este año. Estamos cerrando un 2021 con todo», cerró.