Martin Bruzzo, Presidente de la Sociedad Rural de Bella Vista, comentó que este mal es como un cáncer en el campo. “Hay productores que llegan a perder todo su ganado. Lamentablemente, es un mal que aqueja a toda la región”, dijo el productor.

Según la información aportada, las zonas más atacadas son las costas ribereñas, la costa del Paraná, del rio Santa Lucia y la zona del carrizal. Están marcadas como zona rojas, donde se producen el mayor índice de este delito.

Combate al delito, tecnología y lo que dice la ley

Si bien es un delito complejo, y lamentablemente muy común, desde el Ministerio de Seguridad de la Provincia se desarrolló una aplicación por el cual el productor puede radicar la denuncia directamente a la jefatura de la policía, quien informa al PRIAR.

Además de una nueva ley provincial que fue aprobada en el senado provincial que pide que se cubra las fiscalías en el interior ante el aumento de robos de esta naturaleza.

La Ley 25890/2004 incorporó al Código Penal el Capítulo II bis Abigeato dentro de los delitos contra la propiedad. Es un delito doloso, está tipificado de manera independiente del hurto y del robo, y tiene agravantes propios.

Una de las mayores dificultades que presenta este delito es la efectiva condena de sus autores, ya sea que se trata de grupos pequeños y organizados o el robo de pequeñas cantidades de ganados. Muchas veces faenan a los animales en el mismo campo.

Riesgo Sanitario

Este delito no solo afecta económica del productor, también sanitariamente. La carne robada y faenada en el campo de manera ilegal, causa enfermedades por la contaminación cruzada, generando problemas de salud en la comunidad.

Enfermedades como salmonella, listeria y escherichiacoli están en la lista de los problemas sanitarios que apareja este tipo de delitos así como también la faena ilegal.