Proyecto Rivera: el programa lujanino que cumplió el sueño de muchas familias

Yésica Ponce finalmente tiene su casa propia: «A mis hijos les cambió muchísimo la vida». Conocé su historia.

Yésica Romina Ponce es una de las tantas vecinas de Luján que soñó con tener una casa propia. Hoy, ese sueño en realidad.

Ella es beneficiaria del proyecto Rivera: «Obtuve mi casa gracias a un proyecto de Nacional y Municipal llamado Rivera Luján. La mayoría de las casas fueron entregadas en el distrito de Pedriel. Mi casa, en particular, se encuentra en la calle Brandsen, justamente en Pedriel».

En diálogo con Noticias d, Yésica contó cómo fue el proceso y cómo le cambió la vida a ella y su familia.

¿Cómo cambió tu vida después de la entrega de tu casa?

-Nos cambió por completo la vida con la entrega de la casa. Tener mi propia casa era mi sueño, algo que anhelé siempre. Pero sobre todo a mis hijos les cambió muchísimo la vida. Antes no sabían lo que era jugar en la vereda o sin ir más lejos en el patio, ya que donde vivíamos era una zona muy peligrosa, existía mucha violencia; era una zona denominada roja y de alto riesgo, vivíamos con mucho miedo.

En este nuevo lugar pudimos encontrar la paz y tranquilidad que necesitábamos. Ellos ahora pueden invitar a sus amiguitos a jugar en nuestra casa, eso antes era algo impensado.

¿Dónde vivías antes?

-Me encontraba viviendo en la calle 9 de julio a 3 cuadras de la Plaza Departamental de Luján.

¿Con quiénes vivís en tu nuevo hogar?

Vivo con mis dos hijos, uno de 16 años y una nena de 6. Somos nosotros 3 solitos los que convivimos muy felices en esta nueva casa.

¿Cuál es tu oficio para mantener a tu familia?

-Trabajo realizando limpieza en distintos lugares como empresas y oficinas.

¿Cuánto tiempo esperaste para lograr tener tu casa?

-Estaba inscripta en vivienda de la municipalidad desde hacía 15 años.

¿Cómo fue el proceso y trámites que les pidieron realizar?

-El proyecto Rivera Luján se dio de manera súper rápida. En el año 2016 comenzaron con el gran censo y relevamiento de gente y en noviembre de 2019 ya teníamos nuestra casa entregadas.

El trámite consistió en los distintos tipos de censos realizados por las asistente del proyectos. Después nos tocó entregar la documentación personal y familiar con las que fueron armando las carpetas de las casas.
También nos pidieron un papel de residencia y de ingresos de las personas que trabajan en negro y por último entregar el papel de antecedentes penales.

¿Cómo te sentiste cuando te avisaron que se iba a concretar la entrega?

-La verdad yo trabajé a la par con el proyecto y estaba al tanto de todo lo que iba pasando día a día. Lo que más me emocionó fue tener que trasmitir la noticia a las demás personas. Sinceramente fue algo muy lindo, me llenaba de felicidad ver cómo se les cumplía el gran sueño de tener una vivienda propia a todas las personas.

Las últimas semanas nos tocó un duro trabajo, ya que transitando la última instancia la gente estaba muy ansiosa y nerviosa, teníamos que calmarla y llevarles tranquilidad y fe de que todo iba a salir bien.

¿A quiénes conocés que hayan concretado el sueño de una casa propia como vos?

-Conozco a muchísima gente: vecinos, parientes y además otras personas que no conocía y creamos una amistad en el trascurso del tiempo. Con el proyecto nos hicimos muy buenas amigas y amigos.

¿Cómo es el pago de la casa?

-Hasta ahora no se ha abonado ningún tipo de cuota por la pandemia. Pero el proyecto consiste en pagar cuotas a 30 años y la misma varía dependiendo la vivienda y los ingresos declarados. Las cuotas serían mensuales y se le pagaría a la municipalidad.

Me parece de suma importancia destacar y agradecer la gran ayuda que tuvimos de la Licenciada en Trabajo Social Antonela Porcel. Es una de las asistentes que nos acompañó en todo momento durante el proceso de la entrega de las viviendas. Es una persona con un enorme corazón que luchó día a día junto a nosotros para que pudiéramos obtener nuestras casas.

Por último, Yésica agregó: «Actualmente soy la Vicepresidente del Barrio Jardines de Brandsen y quiero seguir ayudando a mis vecinos y aportando a la comunidad. Tengo la necesidad de que el barrio siga mejorando y que se vaya renovando. En mi mente tengo un montón de proyectos para apartar, me encantaría ver día a día que la gente y los niños más que nada vivan mejor y como se lo merecen».

«Mi gran sueño es que el Sr. Intendente Sebastián Bragagnolo me escuche y me apoye en mis proyectos, que no nos olvide en este momento en el cual nuestra vida dio un enorme giro, aún lo necesitamos y queremos ser día a día mejores», concluyó.

Contenido provisto por: Ailín Cammeruccio