«Los bollitos y las empanadas de Ayala», un clásico sanroqueño

Virginia Torres, conocida como “Doña Juana”, nos cuenta la historia.

Su abuela nació y se crió en San Roque, lo mismo que su mamá. “Me siento orgullosa de vivir en San Roque”, pueblo que cumple 250 años. Virginia Torres, más conocida como “Doña Juana”, conversó con Noticiasd: su historia, sus empanadas y bollitos, el cariño de la gente.

“Doña Juana”

Se crió en la costa del río Santa Lucía hasta que una inundación en 1962 hizo que se mudara. Junto a su marido, Ayala, compraron un terreno y comenzaron a construir en la ciudad. “Yo ayudaba al albañil en la construcción” dice esta mujer que conoce toda la ciudad.

A los 16 años estaba casada y al poco tiempo fue madre. Cuando apenas 3 de los 8 que tiene habían nacido, falleció su madre y tuvo que hacerse cargo de 4 hermanos. “Entonces eran 7 las criaturas que debía cuidar”, afirma “Doña Juana”, que trabajó durante 7 años repartiendo diarios El Litoral en bicicleta.

La comida fue algo que le permitió hacer frente a sus necesidades. Así fue como de a poco se fue haciendo conocida con sus comidas caseras. El tren cumplía un rol fundamental, la gente que llegaba y se iba eran sus clientes. También los operarios.

Canastos con bollitos y empanadas

«¿Quién no comió sus famosas empanadas o bollitos (bolas de fraile)?«, suele decirse en San Roque. Los “Bollitos de Ayala” son el deleite de los sanroqueños en las tardes pueblerinas. “Doña Juana” los llevaba en sus canastos, al igual que los vendedores ambulantes a los que ella les daba trabaja y dice estar “muy agradecida”.

También están “las empanadas de Ayala”, que según la gente “tienen ese no sé qué. Un sabor inconfundible”. “Doña Juana” se presenta como un transporte a los años de secundaria para muchos y muchas, quienes afirman que: “era toda una odisea comprar esas empanadas a escondidas de las autoridades escolares. Había que “pescar el canasto con un anzuelo improvisado”.

Antes de despedirse, “Doña Juana”, le dijo a Noticiasd: “el secreto está en las manos y en el amor que se le pone a la comida. Lo mejor que me llevo de todo esto es el cariño de la gente. Algunos que vienen de otros lados y me visitan para que les prepare los bollitos”.

Los bollitos y las empanadas de Ayala son un clásico de San Roque.

Contenido provisto por: Federico Coguzza
Fecha de Publicación: 19 septiembre, 2023