Ante el avance pronunciado de este repudiable fenómeno cibernético y social, el Municipio entendió que es imperioso preparar a sus trabajadores en prácticas destinadas al adecuado uso de las redes sociales y plataformas digitales interactivas. La iniciativa surgió de la mano de la Secretaría de Desarrollo Humano, que inicialmente capacitó a todos los miembros de las direcciones dependientes de la misma; no obstante, la idea es hacer el programa expansivo a los integrantes de todas las instituciones –públicas o privadas- del departamento.

Esta actividad se está desarrollando en el marco del convenio que tiene la Municipalidad de Luján de Cuyo, oficializado recientemente por el Intendente Sebastián Bragagnolo, y la Fundación Grooming Argentina.

El Jefe Comunal, a través de una videoconferencia el pasado mes de marzo, firmó este acuerdo de colaboración con el representante de la organización sin fines de lucro, Hernán Navarro. En ese momento, esta conformidad mancomunada se concretó a partir de la identificación, por parte de las autoridades municipales, de una problemática que crecía silenciosamente en la comunidad, afectando a una población particularmente vulnerable como son los niños, niñas y adolescentes.

Aludiendo a Grooming Argentina, es importante contar que fue creada con el propósito de trabajar fundamentalmente sobre tres ejes basados en la prevención, concientización y erradicación de esta práctica maliciosa en el país. La ONG se encuentra conformada por un grupo interdisciplinario de profesionales destinados a tratar este flagelo cada vez más incisivo con el protagonismo, y consecuente crecimiento, que están teniendo las herramientas digitales, principalmente las que poseen funciones sociales interactivas.

Para mayor información o consultas, los vecinos pueden enviar un mail a [email protected]

¿Qué es el grooming?

Este anglicismo (del verbo to groom, que refiere a conductas de acercamiento o preparación para un determinado fin) representa un engaño pederasta o una práctica conocida como ciberacoso.

Concretamente, se trata de una serie de conductas y acciones emprendidas por un adulto, a través de Internet, con el objetivo deliberado de ganarse la amistad de un menor de edad, generando una conexión emocional con el mismo, en vista de disminuir las preocupaciones de la víctima y poder abusar sexualmente de ella.