Envuelto en un escándalo, el entrenador Ricardo Caruso Lombardi, quien renunció el miércoles a la dirección técnica de Miramar Misiones, de Uruguay, tras proferir insultos racistas contra un árbitro, está siendo investigado por la justicia uruguaya por presunta incitación al odio.

El incidente ocurrió el lunes hacia el final del partido de primera división en el que Miramar Misiones perdió 2-1 contra Liverpool FC por el torneo Apertura. Durante el encuentro, Caruso Lombardi estalló contra el árbitro Javier Feres por expulsar al jugador Guzmán Pereira, y como consecuencia, recibió una tarjeta roja. En un momento de exaltación, Caruso Lombardi profirió insultos racistas hacia Feres, llamándolo «negro de mierda» y «jetón». Horas después del incidente, el DT de 62 años se disculpó en la red social X, expresando sentirse «avergonzado» por sus palabras.

La Fiscalía de Flagrancia de 10º turno, a cargo de la fiscal Eliana Travers, asumió el caso después de la denuncia presentada por Feres. Además, se ha solicitado el relevamiento de las cámaras de video y la identificación de posibles testigos, así como la designación de un abogado defensor.

La investigación tiene como objetivo determinar si se configura el delito de incitación al odio, el cual conlleva una pena de tres a 18 meses de prisión.

Asociación de Fútbol condenó sus dichos

El martes, la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) condenó «enfáticamente» los comentarios de Caruso Lombardi y anunció que tomaría medidas disciplinarias. El DT se enfrentaba a una posible suspensión de hasta cinco partidos.

La Asociación Uruguaya de Árbitros de Fútbol (Audaf) exigió un castigo «con la mayor severidad posible». Por otro lado, el grupo afro-uruguayo Atabaque demandó acciones penales «ejemplificantes» por parte de la justicia.

En medio de la polémica, Caruso Lombardi puso su cargo a disposición de la gerencia del club, la cual aceptó su renuncia. El entrenador, quien había tenido discusiones anteriores con árbitros pero sin hacer uso de insultos de índole racista, declaró en una entrevista con la radio Sport 890 que no estaba dispuesto a estar alejado de las canchas durante cinco partidos y negó ser racista.

«Lo único que me molesta es que metan al racismo de por medio, porque yo convivo con varios chicos que son de tez morena y están conmigo todo el tiempo jodiendo y estamos abrazados», aseguró. Y añadió: «Le dije ‘Negro de mierda’ (a Feres) de bronca, porque es una manera de hablar que tengo cuando me enojo».

Caruso Lombardi había asumido el mes pasado como director técnico de Miramar Misiones y dirigió seis partidos, con un saldo de una victoria, un empate y cuatro derrotas.