Caleb Cuevas, Gastón Prevostini, Brisa Pensado y Agustina Contreras, son estudiantes avanzados de la Tecnicatura Superior en Administración de Pymes y tuvieron el desafío de generar un proyecto para construir un nuevo espacio recreativo en Tapalqué. Se trata de un “simulacro”, en el marco de su trabajo final, pero según Caleb, las respuestas de la gente arrojaron resultados increíbles.

El grupo tenía que elegir un lugar y un tipo de proyecto. Tres de cuatro integrantes son tapalquenses, por esta razón, eligieron la ciudad y decidieron poner en marcha una encuesta sobre la reacción de la gente si se abriera una cafetería temática.

Hicieron un formulario online y lo compartieron entre sus contactos de la ciudad. Al momento de armarlo, tuvieron en cuenta algunas cuestiones: identificación de clientes, de proveedores, competencia y grupos de interés. “Tenemos que posicionar el proyecto, hay que establecer una cadena de valores del proyecto”, explicó Caleb.

Con la encuesta pudieron saber la demanda que hay en el mercado de la ciudad específicamente. ¿Cuánto están dispuestos a pagar? ¿Consumen café? Fueron preguntas que estuvieron incluidas en el formulario.

 Además, incursionaron en una temática más profunda, el veganismo. Consultaron a los potenciales clientes si tienen interés en los productos orgánicos como opción saludable. El objetivo de su proyecto es fusionar la venta de café con gastronomía e historia tapalquense, por ende, es un proyecto orientado al vecino de Tapalqué y al turista.

“Nosotros elegimos un café-bar y sabemos que este tipo de lugares no solo vende productos, sino comodidad, punto de encuentro y status”, continuó el joven. Según ellos, Tapalqué es un mercado “emergente” porque no hay cafeterías como la que están proyectando. Por otra parte, vieron a la ciudad como una fuente de turismo ya que en poco tiempo quedara inaugurado un nuevo complejo termal.

En cuanto a los resultados de la encuesta, Caleb afirmó: “Son interesantes, porque hay un gran caudal de personas que acepta y prefiere los productos orgánicos dentro de las posibilidades de consumo”. Mas allá de que los jóvenes aclararon que es un proyecto enmarcado en un trabajo de cátedra, la gente se mostro interesada en que se lleve a cabo, porque es un espacio que Tapalqué no tiene.