El chico de Luzuriaga que quería ser futbolista y hoy conduce el noticiero en Canal 9

José Luis Bazzali debutó a los 17 años en el viejo Nacional B y hasta fue extra en “Son Amores”. A los 23 años dejó la pelota por los micrófonos. Conocé su historia.

Debutó a los 17 años en Godoy Cruz, en el viejo Nacional B. Con 1,90 m. de altura era un delantero prometedor. Muchos representantes luchaban por tenerlo en sus filas, pero fue Jorge Cyterszpiler -quien fuera apoderado de Diego Maradona- quien lo convenció.

Viajó para probarse a escondidas en el Barcelona, pero cuando volvió todo cambió para José Luis «Chicho» Bazzali, el «chico de Luzuriaga».

“Se acercó un grupo empresario y me llevaron a prueba a escondidas a España. Cuando regresé los dirigentes me bajaron al Tombita. Era como un castigo. Pero yo quería irme afuera y estaba molesto. Creía que podía jugar», contó Chicho.

Más tarde, recordó: «Me prestaron a Gimnasia, donde estaba Alberto Garro, quien me había hecho debutar , después pase por Huracán de San Rafael, Gutiérrez, All Boys, donde dirigía Caruso Lombardi. También anduve por Catamarca y finalmente en Atlético Argentino”.

Sin embargo, el arranque frenético tuvo su freno inesperado: “Tenía una ilusión muy grande y con apenas 23 me empecé a desilusionar. Me prestaban todos los años y no quería vivir más en una pensión y comer fideos pegados, me cansé. Lo último que me ofrecieron era ir a Alumni de Villa María y ese año me había puesto de novio con mi actual señora, así que decidí dejar”.

José Luis, al centro, fue uno de los locutores de la Fiesta de la Vendimia de Maipú.

Hoy la pelota sigue siendo la gran pasión de José Luis, pero del otro lado de la tela: en el palco de prensa. “El amor por los medios despertó cuando estuve en All Boys. Vivía en una pensión enfrente de la cancha, donde por aquellos años se filmaba la serie “Son Amores”, desayunábamos y nos íbamos a ver la filmación. Me encantaba. Así fue que me metí a hacer un curso de periodismo deportivo en Buenos Aires, pero no lo terminé. Hasta un día fuimos extra en la serie con algunos de los chicos”.

“Cuando volví a Mendoza hice la carrera de Conducción y Producción de TV con Oscar López Pájaro. Me fui formando con los programas. Vendía publicidad. Hacia cursos de locución y fonoaudiología. Quería estar bien preparado. Recorrí muchas radios y proyectos antes de llegar al canal. Es una profesión dura, donde nada es fácil”, agregó Chicho, que junto a Virginia, son papás de Agostina (12) y los mellizos de un año, Emma y Giovanni.

Al respecto del trabajo en casa contó: “Por la reducción de la redacción para cuidarnos, en el canal me tocó unas semanas hacer mis tareas desde el hogar, pero no es lo mismo. En el día a día del noticiero tenés un estado mental y corporal diferente y cuando no lo tenés se nota. Fue raro salir desde mi casa, con lo que significa el desafío técnico para poder hacerlo bien. Más allá de eso, uno quiere estar en la ‘frontera’. Querés estar ahí, pero también pensás ‘si te llevas el virus a casa…’”.

‘Chicho’ debutó con 17 años en Godoy Cruz en el viejo Nacional B.

Luzuriaga, su lugar en el mundo

El barrio en el que nació, es el mismo en el que creció y aún vive. “Cuando era chico me daba un poco de vergüenza decir que era de Maipú porque jugaba en Godoy Cruz. Después fui creciendo y me di cuenta lo importante que era el departamento, hasta me fanaticé«, expresó Chicho.

«Ha crecido mucho y es un placer vivir acá. En Luzuriaga los vecinos siguen siendo vecinos. Se siguen sentando en la vereda en verano. Es otra cosa”, sintetizó.

Durante el noticiero de Canal 9 de la mañana, José Luis tiene su espacio de deportes con un poco de humor.

En la última Vendimia departamental, José Luis fue uno de los locutores y pudo cumplir así otro sueño: “Fue una experiencia increíble. La verdad la pase muy bien y ojalá pueda estar otros años”.

Contenido provisto por: Javier Chacón