Marzo es el mes de la prevención del cáncer de colon

El 90% de los casos tiene cura si es detectado de manera temprana.

El cáncer colorrectal generalmente comienza con un crecimiento en el revestimiento interno del colon o del recto, estos crecimientos se denominan “pólipos”.

Algunos tipos de pólipos pueden convertirse en cáncer con el paso del tiempo (por lo general muchos años), pero no todos los pólipos se convierten en cáncer. 

En este sentido hay factores de riesgos que hacen que un paciente sea más propenso a tener pólipos y quizás en un futuro cáncer colorrectal. Algunos factores de riesgo, como el fumar, pueden cambiarse. Otros factores, como la edad o los antecedentes familiares, no se pueden cambiar.

Los vínculos que hay entre la alimentación, el peso y el ejercicio con el riesgo de cáncer colorrectal son llamativos en todas las investigaciones científicas.

Foto: Prensa Gobierno de Mendoza

“Siempre recomendamos una buena alimentación, rica en fibras, realizar actividad física con regularidad, evitar el consumo excesivo de alcohol y carnes rojas, y en caso de tener antecedentes familiares de cáncer colorrectal o pólipos realizar una consulta médica para hacer los estudios que sean necesarios” explicó Laura Gatica.

El cáncer colorrectal es una enfermedad silenciosa, que en general no presenta síntomas y es detectada en pacientes, tanto hombres como mujeres, después de los 45 años. De aquí la importancia de realizarse los controles correspondientes:

Hombre o mujer mayores de 50 años sin antecedentes familiares ni síntomas: realizar un test de sangre oculta en materia fecal, en el caso de que el resultado sea positivo se realizará una colonoscopía para continuar estudiando al paciente.

Hombre o mujer entre 45 y 50 años, con antecedentes familiares: colonoscopia de control, en el caso de salir sin alteraciones y no tener síntomas se repite cada 3 o 5 años.

También, la especialista destacó el alto porcentaje de pacientes que se curan cuando la enfermedad es detectada y tratada en estadíos tempranos: “El cáncer colorrectal se puede prevenir y también se puede curar, ya que un 90% de los pacientes que son tratados en estadíos temprano, lo superan y logran tener una calidad de vida similar a la de una persona sana, siempre realizando el seguimiento correspondiente”.

Para finalizar Laura Gatica, destacó el trabajo conjunto que realizan desde la sección de Coloproctología, dirigida por Jorge Pérez, con Gastroenterología, Oncología, y en caso de ser necesario con Cuidados Paliativos.

“El Hospital Central cuenta con toda la estructura y el recurso humano para contener al paciente desde que ingresa con la inquietud o el síntoma. Es estudiado, evaluado, operado en caso de ser necesario y luego guiado y controlado en el tratamiento que le sea indicado” concluyó la cirujana.

Fuente: Prensa Gobierno de Mendoza