Río Diamante: Investigadores hallan los indicios de la ocupación incaica más austral del país

Los investigadores encontraron siete sitios con grabados rupestres y uno con estructuras arquitectónicas y cerámica.

Investigadores del Conicet encontraron, en las nacientes del río Diamante, centro-oeste de la provincia de Mendoza, los sitios incaicos más meridionales descubiertos hasta al momento en territorio argentino, según informaron desde el organismo.

Según detallaron desde el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet), los investigadores hallaron siete sitios con grabados rupestres y uno con estructuras arquitectónicas y cerámica, que pueden asignarse al período de ocupación del imperio precolombino en la región.

“Entre los motivos de arte rupestre relevados predominan líneas serpentiformes realizadas a través de abrasión sobre las superficies patinadas de grandes bloques que se destacan en el paisaje. Se entiende que son representaciones de Amaru (anaconda, la serpiente de agua), un ser mitológico de los incas”, detalló Víctor Durán, investigador principal del Conicet en el Instituto Interdisciplinario de Ciencias Básicas (ICB, Conicet-UNCuyo).

A pesar de contar con información sobre vestigios incaicos en esa zona, es la primera vez que se realiza una expedición para relevar el área con ese objetivo.

Según explica el científico, arqueólogos e historiadores optaron por considerar que el control efectivo de los incas sólo había llegado hasta el río Mendoza, detallaron en el sitio web oficial del organismo.

“El hallazgo de estas grandes rocas con motivos serpentiformes en las nacientes del río Diamante coincide con lo planteado por Gerónimo de Vivar en 1551, y aunque los restos no coincidan plenamente con su relato, marcan claramente, junto a fechados radiocarbónicos y otros restos materiales obtenidos de clara filiación incaica, que ese Estado alcanzó y controló este sector de la cordillera. Por ello, la nueva evidencia obtenida permite proponer a estos sitios como la expresión más meridional del control incaico de la vertiente oriental de Los Andes”, explica el arqueólogo.

Durante el desarrollo del proyecto- según se informó- los científicos también obtuvieron información sobre algunos de los recursos que los Incas explotaron en estos ambientes de altura (3.200 metros sobre el nivel del mar).

“Se ha encontrado, por ejemplo, uno de los lugares donde se extraía y trabajaba obsidiana (roca volcánica). Entre sus restos de alimentación se han hallado huesos de guanacos y también de una llama. Se pudo determinar que trasladaban leña de plantas de la vertiente occidental y procesaban pigmentos minerales», sintetizó el arqueólogo.

Fuente: Télam