La Agencia Provincial de Seguridad Vial (APSV), dependiente del Ministerio de Seguridad, llevó a cabo durante febrero un total de 168 operativos sobre la Ruta Nacional N°11, entre Sauce Viejo y Coronda, y sobre la Ruta Provincial N°1, entre Santa Fe y Rincón.

El trabajo de fiscalización que realizó la Policía de Seguridad Vial, junto a personal de los municipios, dio como resultado un total de 3.691 vehículos controlados, donde se labraron 1.786 actas por diferentes faltas de las cuales 110 correspondieron a alcoholemias positivas.

Entre los conductores que dieron positivo al test de alcoholemia, se encontraron valores muy por encima del valor permitido. Un conductor de automóvil particular superó los 3 g/l, la máxima medición que toma el alcoholímetro, y otro alcanzó los 2,26 g/l, siendo 0,5 g/l el límite no sancionable. Por otro lado, tres motociclistas superaron los 2 g/l, cuando en este caso 0,2 g/l es el valor máximo no sancionable.

Al respecto, la directora provincial de la APSV, Antonela Cerutti, expresó que “es una gran labor la que realizan los agentes de la policía vial detectando casos de alcoholemias positivas en conductores. La ingesta de alcohol afecta los reflejos motores de las personas y estadísticamente constituyen una de las principales causas de siniestros viales con fallecidos”.

Asimismo, Cerutti agregó que “sin la presencia de estos operativos no hay posibilidad de individualizar estas conductas irresponsables, por ello la importancia de cada control para la seguridad vial”.

La Provincia continúa de esta manera reforzando la seguridad en rutas con operativos de saturación en diferentes puntos, controlando documentación, la utilización de elementos de seguridad y poniendo énfasis en evitar las conductas de riesgo que más ponen en peligro la seguridad de los santafesinos.